Un amor posesivo.
a qu
da bueno pa
la qu
que en su mente no había otra so
ciertamente no era pasión... De hecho,
No era amor. Y no
eso es todo... Solo de pensar en lo sencillo que fue hac
la qu
o h
se tratara de un
enta de lo fuerte
a esa e
que se encontraría con esta mujer, que inicialmente pe
e, en un mal parpadeo, notó
os seguidos, aunque ni siquiera lo miró. Y empezó a apretar el volante con tanta fuerza en el momento en que la vio cruzar los brazos, mostrando un poco más de conf
rlo de ella, y solo estaban hablando, y seguramente un preadolescente no sería una amenaza. Estaba aterrorizado de no verla nunca, y
aba pro
aba con
e ella tuvier
aba que le p
nsaciones que gua
l darse cuenta de todo esto
debido a su corte de pelo común y a su rop
repente se convirtió en una. Terminó s
un "¿Quién es ella?" -en el mismo momento en que se subió al vehículo- y con urgencia, aunque solo fuera capaz
el motivo de la pregunta, po
er, Javier? ᅳ en u
a saber q
que hizo que Eric se sintiera
fesora? -la m
una es
onfirmó en el
ano tan curioso por una mujer así. Estaba interesado, por
de desistir de volver a arrancar el coch
. Era p
va, intensa, llamati
atractiva. Era perfecta. Perfecta.