FORZADA A CASARSE CON EL CEO
a que me ayudó a llegar al cuarto de baño del Club, pues mis ganas de vomitar eran tan fuer
a puerta dándome cuenta casi inmediatamente que aquello no era el cuarto de baño, haciendo que las dos nos riéramos a carcajadas ya qu
ue nos ayude, no te muevas ¿eh? - me dijo L
de toda la gente que por allí entraba y salía, sintiéndome pequeñita. Una de las chicas que en ese momento salía de aquel cuarto de baño, me dio un empujón haciendo que me tambal
escuche hablar a un hombre con un
stán sentados cerca de la pista de baile - le dije como pude, ya que cas
mi cintura con su brazo, haciéndome subir p
dije, pero me fije que entrabamos en una especie
- le repetí varias veces asustada, sin obtener ninguna contestac
en la cama, no te resistas ahora conmigo, voy a hacer que gr
ase de mujer, déjeme por favor, qui
de que estaba casi desnuda, sintiendo como las manos de aquel homb
ro hombre, sintiendo el calor poco después de sus brazos rodeando mi hombros co
a ti no te importa lo que le pase, les he pagado a sus amigos pa
que te parta la cara, nadie la tocara mientras este
ito? adelante, yo ya me marcho, esp
, las facciones de su cara eran perfecctas y sus labios puede ver perfectamente que era carnosos y muy deseables. Nos quedamos los dos mirándonos fijamente, sintiendo como me acunaba en sus brazos mientras su mano acariciaba mi mejilla como si quisiera tranquiliz
e de las chicas que estan bebida
cama, para intentar levantarme, pero el fuerte dolor de cabeza que tenía me hizo volver a tumbarme tapandome la cara con el almohadón, sintiendo que el aroma que tenía aquello, no era ni mío ni de mi novio Adrian, incorporandome enseguida para saber cierto donde me encontraba. Aunque me costó un poco, abrió de pronto los ojos, restregandome con mis puños, ya que lo estaba viendo todo en forma de neblina, comprobando así que aquel lugar ni era mi cama, en mi casa. Cuando me levante, me tape con la sábana acercándome hacia lo que me parec