Irresistible Tentación
o, cortándome hasta el habla. Tiene una mirad
ud, rozando sus dedos de una manera muy tentadora que acel
bien,
ida, pasándose por la frente una
verse tan jovencito. No creo que sea mayor de edad. En un segundo, que ni siquiera me di cuenta, ya
ro en ese instante todo lo que hacia el hombre llamaba mi atención. De
expresó en voz alta, bajan
de arriba del overol en su cadera, dejando a la vista unos brazos bien grandes y llenos de tatuajes.
e tensan con cada movimiento que hace. No sé qué diablos estaba haciendo en el auto, pero hacía tan
al calor que me gobernaba por dentro y llevé una mano a m
o de barba, pero nada que lo hiciera ver mal. Todo lo contrario, lo hacía ver muy masculino y sensual. Las gotas de agua se deslizaron por su pecho y mordí el interio
ás con imaginar lo que cubre su ropa mis nervios palpitan todavía más deprisa. Sentía un calor y una rasquiña intensa en el medio de m
cuerpo y la pared. No entendía qué me sucedía tan de repente y por qué mi mente se estaba dañando a una velocidad inaudita. Entre más lo veía tra
antes. Era tanta la necesidad de tocarme, que tuve que frotar mis muslos con algo de disimu
os. Necesitaba tocarme, liberarme hasta dejar d
i interior una bola repleta de fuego, que está muy cargada y a la espera de reventar de goce y satisfacción. Entre más apretaba las piernas
inó de reparar el auto -Aníbal m
sobremanera. No sé cuánto tiempo estuve perdida en mis pen
e de pie. Me sentía tan incómoda y caliente, que
s en volver. Aunque confío en Will, él hace un excelente
si suc
cia y su torso desnudo-. Ahí está mi número telefónico por si se te ofrece otro servicio, también hago el domicilio. Siem
ta, viendo con suspicacia y
go me hizo entender sus palabras en doble
n revolcón, pero lo que más me sorprende es que lo quiera