De repente, estoy casada
echaron del Hotel Drunken Moon, tuvieron que ir a cenar al restaurante ubicado al otro lado de la calle
por todo el personal. Megan estaba tan molesta que tenía un nudo en la garganta que le impedía comer. Todo su arduo trabajo parecía haber sido en vano. Había pasado por las buenas y las malas para arre
su madre, dándole
abeza y expresión malhumorada. En
echado, pues este restaurante es mucho mejor. De
ida, papá. Lo que quiero saber es cómo Scarlett logró eso. La p*rra no s
con incomodidad y ponía una sonrisa forzada. "Cariño, sé que estás
verdad. Ella debe haberse acostado con él,
aer en su trampa, pero ni siquiera pensó en eso. Entretanto, Austin estaba sentado frente a ella con una cara tan lar
de queja. "Scarlett me engañó como a un tonto. Todo es
na mentirosa", lo
ombre. Yo mismo he tratado, por todos los medios, de cons
? ¡Te diré cómo lo hizo! ¡Sol
z de su padre, quien gol
llada, para no correr el riesgo de que su
ada con ella. Hizo que te echaran de
se olvidó de su falta de respeto, para enfocarse en que lo h
umillado tanto en
y compañeros. Afortunadamente, ningún conocido estuvo presente en el r
madre estaban bastante acostumbradas a ese tipo de situaciones. No eran de familias
el padre de las chicas sacaba su tel
cariño?", le
las tarjetas de crédito
os. Era la primera vez que quitaba la cara de berrinche
?!", pregunt
y debo darle una lección. Mi hija menor sabrá que no es nada sin
star su dinero. Una vez que guardó su teléfono, los cuatro reanudaron su cena con el coraz
la estaba pasando en grande en la sala privada más lujosa del
guisos más sabrosos de su vida. Se sentía muy a gusto bebiendo pequeños sorbos de un rico vino dulce francés, mientras se
atos llenos sobre la mesa. Unos minutos más tarde, la puerta se abrió de nuevo y una mesera le preguntó si se le ofrecía algo más. Scarl
a haya sido de su
spondió Scarlett con una risita. "Me he l
ombre, con cordialidad. "Si está lista entonces
ro, v
staban las suites presidenciales que costaban una fortuna. La chica estuvo a punto de decir que no podía pagar tanto, pero luego cambió de opinión. De todos modos, p
disposición una habitación decorada con los muebles más elegantes y una vista de ensueño de la ciudad de Nueva York, la cual podía apreciarse desde una
elaje antes de ir a dormir, señorita",
ás agradecida por todas esta
ecesita algo más, solo tiene que llamar a
oy Scarlet
uenas noches, s
rito de felicidad al contemplar su cuarto de ensueño. Era un espacio de aproximadamente seiscientos metros cuadrados. Contaba con dos dormitorios princ
aliente. Junto a esta había una mesita con otra botella de vi
ella recordó lo quebrantada que había estado esa misma mañana, mirando una imagen diferente de sí misma. Nunca hubiera pensad
una música ligera llenó el ambiente. Entonces, ella bebió sorbos de vino con una sonrisa perezosa en el rostro. La chica se relajó tanto que estuvo a punto de caer dormida. Su baño duró más de
n el piso superior, había un hom
qui, cuando alguien llamó a su puerta.
este momento?", le preguntó
el hombre. "En este momento, debe estar en la
Estaba co
mente estaba co
s de su jefe. Ese gesto era extraño en la cara de alguien tan frío como
El hombre sintió una imperiosa necesidad de protegerla, aunque no podía explicar por qué. Había algo en la pequeña Scarlett Devins que lo debilitaba. O
cuerdo?", le mu
ente. De pronto, se vio a sí mismo la noche anterior, con su mano vagando por todo su pequeño cuerpo, tan sexi, que un escalofrío lo recorr
idad. Ryke tenía que pagarle de alguna manera, aunque ella no lo quisiera. Po