Atrapada en la Mansión de Daemon Racchio

re

de control, me decía a mí misma. Mi oficina. Ahora, las cosas se habían compl

que debes asistir es un sitio muy distinguido. -m

ermana mayor había muerto hacía un mes, todavía estaba de duelo. Tenía que

cisión. -dije, tratando de c

punta. Supongo que hasta el último minuto había

e estaban cerca de Marie. El último mes, ella estuvo en con

sospechosos por el asesinato de mi hermana. Yo lo sabía, la policía los

e trabajar haciendo entrevistas y reportajes pequeños. Con el tiempo, me fue dando la confianza de ir a las escenas más fuertes, que era lo que

. Mi hermana, Marie, había sido encontrada asesinada en un predio descampado en las afueras de la

ensando, Carl vo

resolvió que no había culpables en el crimen por falta de pruebas. Por lo que lo que estamos hac

tenía experiencia. Ahora, se estaba arriesgando, ayudándome a desentrañar la injusticia de Marie.

El hotel es su segunda casa. Son buenos amigos, hemos recib

mueca de

inuto. No soy una tonta, sé que iré a un sitio lleno de lujuria. Tendré que soportarlo p

a, me repetí a mí misma, mi trabajo es encontrar la verdad, es meterme e

oz de Carl se tornó severa, él

cuenta. Se que deberé cambiar toda mi jodida personalidad para encaj

oso, necesitaba saber porque la habían asesinado. Habíamos hablado un mes atrás, antes de su muerte, e

arece que está por suceder, prométeme que vendrás corriendo, que escaparás, que dejar

segurarse de que no pondría mi vida en peligro si la

o pro

nidas, desde pequeñas. No habíamos tenido padres que nos cuidaran. Siempre nos habíamos cuidado la una a la otra. Nadie nos co

e de color crema. En el interior, había una falda de color azul oscuro. Mis caderas eran bastante promine

eado. Me ajustaría demasiado. Toda esta ropa era totalmente nueva para mí. Siempre fui tan pudorosa

iocho años. Nunca me había dejado llevar por los deseos. Es más,

tía, eso no me daba vergüenza. Él no se sentía atraído por las mujere

mis senos se quedaban solo arriba, se veían redondeados y grandes. No quería mirarme al espejo, me rubo

lacio en su totalidad. El maquillaje era sutil, pero mis labios tenían un color resaltante y pro

tó en el mismo hotel, después de enviarle mi curriculum con un nombre falso e información falsa.