Laberinto de Mi Ex-Marido
que Jonas estaba sentado en el sofá, mirándola en silencio como una estatua
hasta Yulia la ignoraba deliberadamente cada vez que se veían. Sin embargo, esto a Melin
rarse de que es
a para librarse del Sr. Wang. Tras enterarse, regresó a pie a la mansión de los Gu, sintiend
res abdominales. Lamentablemente, no había una sola persona en toda la mansión con la que pudiera hablar del tema. Por ese motivo quería h
dad, ya que no había regresado a la mansión durante bastantes días. Independientemente de las razones que pudiera haber tenido par
mujer en una pantalla LED en la parte superior de u
e Yulia, ya que no fue culpa suya que Jonas se negar
un ligero dolor en el vientre. Sosteniéndose el abdomen con una mano
in embargo, unas pequeñas gotas de sudor frío comenzaron a bajar desde su fren
empleados que la rodeaban. No estaba segura de si lo había visto bien, pero
. Gu la está espera
in embargo, se notaba claramente en sus ojos. Incluso después de todos est
llí unas pocas veces, principalmente porque sabía que a Jonas no le gustaba que lo molestaran en el trabajo. Allí estab
a la que había temido ver. En ese instante, la m
erta tras de sí, aislando la oficina del exterior, creando un ambiente tenso y silencios
a. Las sutilezas y matices de sus movimientos y la forma en que sonreía atraían la atención de la gente hacia ella. Hace unos años, cua
nte aliviada. La dolorosa escena que había estado temiendo durant
oz era tan dulce como la miel, con un to
na expresión de sorpresa en su rostro y, tras sonreír leveme
que en la televisión. Por favor, no se ofe
junto a la hermosa mujer mientras le lanzaba una m
é él no la quería por all
una sopa, así que he
siquiera probaba una sola cucharada de la comida que ella le cocinaba. La niñera odiaba ver
arlo. Desafortunadamente, la niñera no se había dado cuenta de que mientras Melinda estuvie
mirada y centró su atención en l
. ¿Algo
ella respondió con un suspiro impotente mientras pensaba que, tal vez, él querí
esta noche". Prácticamente le estaba suplicando, pero se d
o los ojos y le dijo: "
dijo Emily, haciéndole un gesto con los ojos mientr
s una cita esta noche". Sin embargo, E
o y le dio una suave palmada
nda se tambaleó hacia atrás y
mo máximo, y así no tendré que molestarte de nuevo. Debería irme ya". Sin esperar la respuesta de Jonas, salió ráp
areo y evitar colapsar en ese mismo momento. Rechazando la ayuda de la secretaria de Jonas, consiguió levantarse por sus propios medios y salir de allí. Las mi
la mansión de los Gu. La frialdad de la noche le quitó el calor del cuerpo, hasta que se quedó rígida y dejó de sentir la cara. F
a y estaba a punto de volver al dormitorio, se dio cuenta de que sus pies estaban tan rígidos que no tenía fuerzas para moverlos, lo
a. En silencio, se quitó el camisón y limpió el suelo, arrojó su vestido sucio en la lavadora