En la Cama de su Hermano: Mi Dulce Venganza
sión de tortura di
rgada de plata y cristal. Damián se sentó a la cabe
ada a la derecha i
vez que miraba ligeramente a la izquierda, él
illo raspó contra la porcelana, un sonido áspero-. Revisé l
. -El mercado es
Damián-. En un año de auge. Parec
atragantó
ro. -¿Y tú, Lucero? ¿Qué haces
ella, limpiándose la boca-. Caridad.
e pusieron blancos. Quería gritar. Escribí la canción
su mano.
r su vino tinto. El líquido parecía sangre a la luz de
colgó en el aire,
ntervino. -¿Es cierto lo de Serena Filo?
ue siguió fue
argo sorbo de ag
to de desmayarse. -R
os profundos. El Fideicomiso de la Familia Real tiene una cláusula muy específica con re
tenedor. Repiqueteó r
Lucero ha estado... difícil. Está haciendo preguntas sob
ceja. Miró a Luce
ovió. Su pierna, sólida y pesa
o lado. Damián presionó más fuerte, su rodilla encajándose entre las
olación. E
staba comiendo casualmente su bistec mientras d
toy firmando -logró decir Lucer
torrilla de ella, la fricción del cuero contra sus medias envi
tó Julián, ajeno al asalto q
do caliente para ti? -pregun
n -logró a
resión sobre su pierna de repen
i auto. Tengo un archivo para Julián en
amente hiperventiland
lando. Siguió a Damián fuera del comedo