Dolores del pasado
umpleaños de mis hermanos y estoy tan absorta en mis pensamientos que
mi hermano Craig me extiende la pequeña caj
e llegue un paquete aquÃ, mi residencia desde hace varios añ
itad, ¡Que extraño! Tomo la nota, la abro encim
mo Bo
P
cuentro en la casa de mis padres, de repente se volvió de noche,
s ojos azules me ob
léjate
orrer, pero mientras más corro,
e giro asustada cuando escuc
llo el novio de
qué
está saliendo con el c
o sudando en la cama. No otra vez por favor, las lágrim
i cabeza queda entre mis brazos sob
eo la hora en el reloj en
00
spejo y mis ojos están rojos de tanto llorar. Hago mis necesidades, me ducho y me dirijo al armario pa
ueño escote, calzo unos zapatos de tacón color beige y me dirijo a la cocina por algo de des
e seguÃa tirada en el sofá. Despertó, comimos
sin hablar. Hablamos de mà trabajo y de todo un poco. La verdad me sorprendà bastante
shb
de diferencia y te vengo a encontrar aquà en un
me mały króliczek "Conejito"?-
completo grano en el culo, osz
Flas
manera con la que me cambio el tema cuando le pregunte por su estadÃa
cina y antes de que la puerta se ci
pera en su ofi
do un momento. Primera hora en la mañana y ya la
na de Amélie, que está en la planta su
ela
tica. Dos pares de ojos me miran fijamente, entre ellos un
po del club. ¿Qué mierd
ien y frunzo mi ceño cuando lo veo pararse de la silla, acercá
s dÃas
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an Mü
una locura y debo admitir que no esperaba que la pelinegra curvilÃnea tuviera tanta fuerza, como para empuja
domingo en la noche me reunà c
la rubia entrar a mi oficina. Se acerca a saludarme, inclinándose sobre el esc
gas
itadas los fines de semana, no seas t
ella son un calvario por el trafico tan pesado, pero llegar tarde no es la única solución, bien s
es lo que
su bolso una pequeña carpeta y me la
a vino a mà para que le ayudara con la editorial, le ayude, me la folle también y quedamos en
uà e
ustado que le llega a las rodillas pero que r
preguntar por su presencia en esta empresa. No seas irrespetuosa- oigo a la rubia teñida a mi
mandarnos al demonio y pide disculpas por su compor
spere encontrármelo aquà señor Müller - me habla con notabl
- la pico para molestarla y me mira mal. Amélie me hala d
es dos s
mporta me suelto de su agarre y me acerco nuev
es Am
n percatarse que hay alguien cercano a la puerta, choca la espalda de Cataleya ha
manera que quisiera- le hablo para que solo
vecha la atención para enderezarse, se suelta de mi agarre y dirige su vista al culpable del atropello
, joder es que
mira y luego dirige su vista a donde estoy haciendo un
do des
tar aquÃ, además de llegar tarde, como siempre haciend
e, Amélie carraspea incomoda y to
aquà para trabajar, no para socializar- la miro y su v
l pelirrojo regañándolo antes de cont
ub de Deaclan y antes de que empieces con preguntas y me repitas lo que ya se, solo
o de la vergüenza. Su mirada conecta con la mÃa y no dejo de mirarla y es
algún motivo siempre aparta la vista cuando sus ojos color chocolate se topan co
la vi, inmediatamente la reconocà y mi cuerpo con una si
mi mente, sus rasgos finos, sus labios rojizos, su pelo largo y negro como la noche y esos
b que abriré dentro de un mes. No sé porque pero algo en ella me
r lo que escon