Seducida Por La Bestia
amento lo supe. Durante la hora y media que caminó en dir
der ponerme de pie y ahuyentar a lo que la estaba acechando pero en cuanto llegó a escasos metros de distancia del lugar en el que
nto de uno. Desarrollé en silencio todos mis sentidos mas allá de lo imaginable, mi vista,
similar a tener a una fiera enjaulada, sin embargo, no ten
s. La única que estuvo pendiente a todo mi avance fue la doctora Greene pero por alguna razón los tachó, rellenó mi informe con información falsa. Ni siquiera guardó un indorme para ella misma
a por mi impulsividad y cuando le pregunté la razón de ocultarselo a los de mas arriba me dijo que sabía lo que ocurriría
i, ademas piensa en lo que ocurriría. Te matar
suelto una risilla aun a sab
bajo para asegurarse de que no haya nadie por allí corriendo el riesgo de ser descubiertos. Muchas
tampoco. Ella usó su tarjeta de autorización y nos saltamos varios operativos para poder salir y hablar un poco. Y fue mas el asunto de tener a un animal enjaula
ara ser un perro, aunque quien sabe, tal vez tenga parte de ello también. Tendré que averiguarlo. El asunto es que me comporte
o herido y hambriento ademas de querer aparentar que mi muerte fuera un accidente, que alguna fiera habia acabado conmigo mientras hacia una expedición. Pero sigo aqui, tres dias despues de que me abandonaran a mi suerte. Lo malo
strategia funcionó, pero aun así tengo
la escalada que tiene que dar la chica para poder matarla y comer
ndo su yugular mas por instinto que por otra cosa. En menos de cinco segundos el ya estaba reducido y yo, retorciendome de dolor en el suelo. No supe que hicieron exactamente con
. Me sorprende que se haya quedado, cualquier persona hubiese salido corriendo. Yo en lo personal, con todo y lo entrenado y que haya visto mucho de lo que soy de donde me sacaron hubiera corri
cieron los diez minutos mas largos de mi vida volvió a ponerlo todo en su lugar y supe que me miraba fijamente y abrí los mios, no para mirarla, sino para mirar
es mas creo que tenia un tono acusatorio. Loyalty, ah, el pastor alemán que vino a mi hace algunas horas al
o porque me preguntaba a mi, un tipo que ella sabía que la podía matar
o rastro de emoción había desaparecido de el
de los árboles y arbustos, el sonido del viento y el olor que arrastraba consigo, el sonido del río, todo a mi alred
do mi distracción o mi debilidad, cualquiera de las dos es valida, no tengo excusas. Al parecer el
a mochila que hace unos instantes había descolgado sobre s
des c
n que hice lo de hace un momento pero lo que
raía entre manos con cierto retitin. No pregunté y ella tampoco dijo nada después de eso. Solo volvió a levantar la sudadera a la altura de mis costillas. No se que diablos hice de bueno para que justo lo que necesitaba en ese momento llegase a mi porque er
í que era necesario. He visto esa mirada muchas
aquella mariconada y que he soportado peores cosas, pero el movimiento de su mano imp
ilio? - pregun
oy orgulloso de mis acciones pero tenía que asegurarme de que los señores Hunter no volvieran a hacerme daño a mi ni a nadie. No me considero mal hijo por haber desviado todos los fondos del ultimo concurso
no tuve el suficiente tiempo a su lado como cualquier hi
de boda. Aquellas bandas de oro blanco fue l
comenzó a hacer efecto en el área en la que fue aplicada. Veinte minutos después de aquello l
para huir y también lista para atacar, nada que ver con la chica a la que hace poco menos de media hora había sorprendido un coyote. Y fue en ese pequeño momento de lucidez en el cual me permití a mi mismo observarla bien. Su piel era
lgo, para tratar de tener un indicio de ella misma, de sus acciones. Pero no obtuve nada, p
evantarte,
ontería, ya puestos una locura, pero es que ¡