witch
nfurecer a los dioses. El trote de caballos se escuchaba a la lejanía,
, porque lloraba?. Todas esas eran las preguntas que invaden mi cabeza después de aquel sueño. Acaso era un recuer
nido, el clima frío, te
nte del interior
, aquel chico deb
con gran sorpresa mientras int
in desp
esto duele
frecí un vaso frente a él con algunas pas
ser un sueño, n
lo
én eres? -
oy
reguntó arrastrando las pal
orazón había sufrido ya un gran daño ante el trauma del accidente, provocar cambios en su ritmo cardíaco pondría en rie
Meg?- dijo
a br
las brujas no existen - d
l chico mit
o tu punt
rdiste mucha sangre y tú
ué hab
n está dañado así que estás vivo graci
nto n
nor
nada de no
forma humana, pero no puedo prometer qu
ía perder, ya
nes t
oso que le quedaba, alg
uién
yo
..
uía con su mirada. Yo me movía por la habitación cambiando las v
parentaba más edad que él. El joven se ruborizó cayendo en cuenta que prácticamente estaba desnudo fren
é su
me mi
debo poner los
o te das
cerraba los ojos intentando encontrar las palabras
qu
cho al descubierto y nada más impresionan
ento pa
a que viese a un chico de tu edad desnud
e hace sent
ender el pensa
o eres human
o so
to que no creía que ella tuviese un gra
eg
uu
chica colocaba los nuevos vendajes en sus brazos
a vez la chica parecía inte
emi
buen n
joven con mucha intriga, ella
o tiempo
a se
s posibl
xaltes, t
ndose dónde estoy, la escuela
todo mient
qu
ar mío y que has estado enfermo - suspire -
casi sin fuerzas, mirando
hora, también arreglaré todo para
a gente a una persona con la m
o que arreg
oy enten
con algunas píldoras redondas de un color púrpura - está mezcla
o hicis
rregle todo mi
dorm
sto a tiempo, además la gente de la escuela com
logrado que faltará tan
tus apuntes y trabajos escolares
n pesadez al escuchar que tendría que reponer
que eran familia y aún se preguntaba cómo había logrado explicar su ausencia durante una semana y aquel ac
vas a la
o h
ona tu falta d
e encarg
Ru
e está bajo mi mand
qu
ando al joven sorprendido, no entendía lo que la
orq
do...fue..hace
ión. La chica levantó la mirada para encontrarse con aquellos ojos color miel, pro
r dificil
lo
n importante, pero aún así ofreció consuelo entre sus b
en ella la ause
para su frágil corazón y aceptar que ya no era más un humano. Ella tendría que comenzar a excavar en el fondo de su memoria, aquello que decidió olvida