Oh My Lady´s Nacida entre la tormenta de poder
por la ma
rlanda del norte, la pequeña Estacia tenía paredes y suelo de piedra y un tejado ondulado. Una
oscura en la que dos mujeres y una gata no podían dejar de temblar de frío y miedo. La puerta estaba asegu
s, en uno de cuyo extremo se ovillaba la gata. Ambas figuras iban cubiertas por sendas capas oscuras. Una de ellas, la de más edad, er
joven, iba vestida completamente de negro y llevaba la toca blanca y negra de las monjas. En silencio, saco de un saco de lona cuatro velon
s segura
pesar de que le castañete
es... c
diferencia. Con un suspiro de resignación, la mujer se rebuscó en un bolsillo y saco unos cuantos paquetitos
divinación es pel
_.¿Y si nos han seguido milady? ¿Y si
acío._ respondió Dolores, apoyando las manos en la m
os inflamados y piel enrojecida. apretaba los la
as y unas sombras tan oscuras como hematomas bajo los ojos. El marco que le proporcionaba la toca no servía
nció el ceñ
n. Tu eres mucho mej
que tengo más prá
mero estrujo en la mano unas cuantas hojas y las coloco en las llamas para que desprendieran su penetra
por los poderes
atorio, desde el centro del recipiente, y siguió así mientras inspirada hondamente seis vece
Qué
esperad, que el c
o las manos para
Y b
to de sangre, habrá una lucha sangrienta. Hay muc
mia?
oscuro, pero no se os guarda en él, una bienvenida o un
s! _ Exclamó Dol
hablar en voz alta lo que ves, e
untando sin dejar de mirar ella misma la fuente
do silenció sin terminar su pregunta de inmediato clavo la mirada en lo que veía. En la superficie de l
. La nariz era recta, los pómulos marcados, la barbilla firme. Sin duda era hermoso. Y mientras se admiraba de su simetría