La Obsesión De Mi Esposa
n confusión. No tenía idea de lo que estaba pasando. Había p
eguridad en su puerta para que lo ayu
entamente fuera de la habitació
se volvió desordenada. Era como si acabara de pasar un tornado. Conteniendo su
orido. Se acercó a Ethan, sacudió la cabez
e quedó sin habla, se formó una corazonada en su mente. Esto debe
upo de guardias de seguridad. Sus movimientos eran como un imán que le
ra atraparla. Ahora todos estaban sin aliento. No importa cuánto lo
a las personas que la habían estado persiguiendo. Su voz se llenó
n atónitos por un momento. Se sorpre
ento allí er
ez. De repente, algunos hombres ya lloraban en el
ce con atención. Cuando ella lo golpeó esta mañana, él ya sabía que ella e
miró con desprecio. Ni siquiera puede ponerse de pie. Debe ser el Ethan discapacitado -se bu
odía creer que estuviera
abrió la puerta. Pero antes de cerrarla detrás de
staban petrificados. No esperab
padre, todavía era miembro de la fam
ró por completo lo que Grace acababa de hacer. Se vol
pujó la silla de ruedas fuera de
frente mientras deambulaba por la villa, buscando l
o la vuelta y emprendió otro viaje para buscar nuevamente la salida. En el fondo de su mente,
erta de la villa, se sorpren
lgo. Fuera lo que fuera, sent
al guardia detrás de él: "Llévame cerca
la timidez infantil en los ojos de Ethan. Asin
stás bu
magnética de un hombre detrás de ella. Cuando se
es definitiva
tenía ninguna malicia, ella dijo honestamente que se había perdido. Ella
ía encontrar la salida. Asintió, entrecerró los
ce cuando escuchó lo que dijo Ethan. Ella corrió d
volvió y le dijo al guardia detrás de él que regresara adentro y
do se dio cuenta de que ya había pasado por este camino muchas veces antes. Solo
caminó frente a Ethan. Luego dijo: "Bueno, gracias por mostrar
podría volver a casa. Ethan se quedó solo, frunciendo el ceño.
la familia Yan sin saber q
n la casa, corrió a la
rrió hacia él y le gritó: "¿Así es como me trata
a, por lo que rápidamente i
ro cuando vio las lágrimas en sus o
que la taza de café que tenía en la mano cayó con estrépito. En u
fragancia del café, pero no alivi
a él. Golpeó con fuerza el escritorio con las manos y se puso de pie. Le