Triple penetración
n poco incómodo al principio, me moví nerviosamente, lo que
comencé a mover mi pelvis hacia arriba y hacia abajo,
preguntó un compañero de clase, – Ya eres ad
on el deseo de despedirme de la virginidad, y no
cuerpo como si fuera un piano. Cuando
o dentro, solo podía imaginar su pene en lugar del dedo. ¡Te
se trataba de sexo. – confesé
hayamos cruzado hoy. Quie
idas escenas pululaban en mis pensamientos sobre cómo me tomaba una polla en mi boc
dolor, – gemí, languideciendo de deseo y mirando el fu
ó burlonamente, lamiendo lentamente sus labios y lue
me levantó en sus brazos y me
ientes pasos, comenzó a quitarme la ropa restante y cubr
visitarlo. Fue como un regalo de arriba. He estado pensando en el sexo durante ta
y a tiempo y se of
uego le pedí que cambiara de posición. Mientras estaba en una p
ta de Ruslan, sonreí triunfalmente y me retorcí
inmediatamente se pegó a mi clítoris con su boca. Chupó mi c
tirando sin contemplaciones de los pezones y al mismo tie
en diferentes direcciones, guiándolo, pero
taba un poco marchito. Apoyando mis labios contra él, y aún en la posición sesenta y nueve, humedecí e
comencé a chuparla, profundizando gradualmente la mamada. Al darme cuenta de
nte con saliva, pasé mis manos y mi boca sobre su polla
ial para el chico. Me incliné y tiré suavemente de sus bolas hacia abajo. Acer
atención. Me gustaba mirarlos y admirar su pulsación. Decid
robar mi teoría y nuevamente bajé un poco la
n la acción sin complicaciones, sin olvid
tratar de lamerle las bolas a mi exnovio, pero no me gustaba. Resulta
distinguido por la belleza. Pero t
ón. Pero lo más importante es que de él emanaba
trasero, bajando automáticamente mi palma hacia abajo. El pene
líquido salival se desbordaba y comenzaba a derramarse por el borde de mis labios, bajando
cimiento sobre el sexo oral. Ruslan me
ondí evasivamente, tomando air
pudo follarte
– Más bien no quería. Pensé que l
ste a ir conmigo. ¿Quiere
ustabas, pero hoy, cuando te co