El CEO y la bibliotecaria

, ella está

el mensaje que recibí de Beat

a las dos mujeres hermosas que estaban en la cama

ricia la carne rosada. Están listas para recibirme y lo único que me vino a

a! - Gruñí e

Doy unos pasos hacia la cama y me desabrocho la camisa negra. Mi polla ya está dura, no dejaré que los problemas de Be

lamo a Janine y

a y la miro. Ella humedece

mi polla en tu

Janine habla

largo de toda la lon

ue está estirada en

voy a

, sostiene mi polla y la maneja de arriba a abajo. Ella abre su

aprietan alrededor de mí. Muevo mis caderas y empiezo a trabajar en

argo de la piel de su muslo hasta que se desliza sobre s

ro tengo ganas de entrar en la otra mu

e la mirada. Ella me chupa con avidez, cada músculo de mi cuerpo se tensa. Odio admi

os mujeres se besan de repente, están cachondas. Me deshago de mis zapatos y el resto de mi ropa. Todo lo que qui

os que no fueron cerrados y empleados i

gas carnosas. Le di una bofetada en su trasero. Paso mis dedos sobre la carne mojada, está empapada.

iz no usó un co

uelvo el plástico alrededor

on ese idiota de Zacary. Aquel maldito hijo de una puta traicionó a Beatriz.

cho a Isabel gimotear entre las piernas de Janine. Entré y salí, empujé más fuerte, penet

! - Empujo

en una y otra vez. Por la forma en que Isabel la chupa

disfrutarl

asiente co

que termine

or! - Janine resp

se muerde los labios me excita much

nine y la puse a cuatr

ara admirar mi polla dentro

las pierna

one en posición. Chupo tus labios como un mango maduro. Le ofrezco mi polla y e

eres de

e ella trajo a su amiga. Por la forma en que se tocan, creo que hay más que

Le separé las pi

n fuerza por la cintura

dentro de ella con más ganas. - ¿Te gusta dá

- Ella chilla. - ¡Por ​

ntras follo a Janine. Mis piernas ya estab

condón, tirando de

y abajo frenéticamente. - ¡Trágatelo todo! - Mis pierna

carnosos, a diferencia de Janine, que m

acuesto en las sábanas de

dón, ¿por qué no co

tenía sexo con la Sra. Harris. Mi suerte es que mi socia ya está en la menopausia. Sí, me gustan las m

ollo a una mujer, este

ío en la mano derecha de J

solo ha visto una vez en su vida. Mi iPhone suena e interrumpe mis pensamientos

o móvil de mi bolsillo. Voy directo al baño, no q

igo la voz suave al ot

ndito almuerzo en

en Río, mañana vuelvo a Lisboa! - Le sonrío a Isabel cuando entra al baño.

la esponja con el jabón líquido sobre los pezones, pasa por el vientre hasta llegar al co

Atravieso la puerta de la ducha empañada por el vapor mientras lo

así! -, l

aprieto. Me deslizo por las bandas hasta que llego al medio de su trasero, donde paso m

ro foll