Casate conmigo
una F
los supuestos "amigos " un chocolate caliente y unas galletas de coco, pero los halló besándose
ry tenía novia y ella los habia visto juntos. Aunque Harry no parecía
ello castaño brillante y cedoso y su acento italiano, tenían obviamente a la chica
o para su sobrina y obviamente estaba dis
y al chico Caruso abrazarla y llorar tamb
omesas que se hicieron el uno al otro y él pacto del chico Caruso de esperar a que Sophia volvier
esconderan su amor y de aquí no saldrá hasta el tiempo oportu
eron la
le agradezco con el alma q
n casa de una amiga hasta que nos casamos.. Ella me ayudó, y yo los ayudaré.. Sólo ten
culpa l
en esto, debió ser honesta contigo
razón
chocolate que les traía, sino fuera
os.. Sólo..
No te preo
e señora y, m
nte como se te iluminaba el rostro cuando Sophia aparecía... Con Frank te veías conte
bas enamorando.. Y
con su hermosa sonrisa el corazón se me salía del pe
ansforma.. Per
eñora.. ¡Se
bien...Eres un
cuida de ese corazón,
razón, mi corazón se muer
a la casa, miró a su sobrina y le dijo en
do dos cualidades muy notorias, una; e
za florecer en abundancia. Su cabello castaño claro muy ondulado y abundante, le daba una melena que se la envidiaba c
, firme y determinada, apasionada en todo lo que hacía. Para su tía, esas cualid
y pronto! - Se reía al recordar como su esposo,
Fue feliz.. Y aunque su esposo había partido con el Señor, ella l
a que te hizo reír? - le preg
iandolo mantenía la dulzura y la profundidad del beso, suave, dulc
ro de Harry, su tía le sonrió y le dijo: ¡Como toda una Ferrer! Sonriendo
ís dulces besos. Lo que un día soño lo vivía esa noche y no podía sentirse má
lo en en ellos y recordaba vivamente lo que sentía cada vez que rozaba los gruesos labios de Sophia,
deseaban convertirse en el dueño de su corazón. Sophia Edwards era la dueña de su corazón
es que cada vez que estaba contigo, no quería est