La Heredera
r y violencia; para las mentes perturbadas o sensibles se les p
2018 Nueva
nko/ Rey d
ada y con la apariencia de ser frágil
comenzado a moverse, el cal
erle daño.- me dice Iván, ofreci
ra.- le ordeno, ya que no
se
despertando, se mueve y la veo int
, si sigo subiendo la calefa
verde intenso, una combinación exótica con ese cabello de color caramelo rojizo. No puedo dejar de notar s
usted y qu
r por su apariencia, ella c
ue dime en donde ésta mi hijo?- le pregunto con
co y no sé quién sea su hijo!- me res
HIJO, ESE NIÑO ES MÍO Y LO QUIERO AHORA!- vi su reacción cuando me escucho, era d
me dice tratando de mentirme y a mí no me gusta que me mientan, veo la mirada de terror en sus ojos y tratando de usar eso a m
PLACER MIENTRAS TENIAMOS SEXO Y MIS INVESTIGACIOBES ME DICEN QUE FUISTE TÚ; ASÍ QUE DIME EN DONDE ESTA MI HIJO?- mientras le grito llevo la mano a
ojos es real, pronto me dirá lo que quiero
ue esperaba, pues no me dijo dónde estaba
o con....- No la dejo terminar, ya lo he investigado, ella es aquella mujer por lo que molesto,
TENDRE A MI HIJO DE UNA U OTRA M
un error.- Comienza a decirme por lo que me acerco aún más y sujetándola del cabello y j
d, no he terminado de castigarla, no cuando todo indica que tuvo un hijo mío, resultado d
nas a ambos lados de su delgado y pequeño cuerpo. Sujeto sus manos con una sola de las mías
eñal de que pronto sedera por miedo y me entregara a mi hijo y para agrandar s
primera vez que ponga mis manos en ti.- y poniendo la pistola a un lado, comienzo a tocar su cuerpo, ella es bella y viéndo
Carajos como si ella pudiera hacer algo, solo la diferencia de sexos la nulifica y sumando la difer
más pequeña, pero no es ella, no puedo equivocarme. Bajo un poco sus b
un hijo de que
de lado para ser una cesárea no c
tomarme por tonto, esto me molesta por lo
espiro el aroma de su cuerpo en su cuello, el miedo y el calor lo hacen más intenso, desperta
a mí disfrutarte hasta cansarme.- me muevo un poco, solo para poder di
decir mientras intentaba soltarse o re
rme más y decidido a h
uitar las bragas, para después colocarme entre sus delgadas y torneadas piernas, puede no ser muy alta pero tiene un buen cuerpo, u
ciente para lo que deseo en este momento, que es disfrutar
empujarme con las piernas, más lo únic
s está tratando de soltar
o... Ahhh.- no le hago caso, no voy a abl
de robarme para lo cual me drogo aquella noche. Más al salirle algo mal ter
to como su cuerpo se resiste a darme paso, más al hacerlo la escucho gritar, por lo que suelto sus manos, esta vez con mi mano libre, cub
me en su interior, ella por su parte esta quieta, creo que ha enten
con eso la dejare, está equivocada, es cuando lo hago noto unas pequeñas gotas de sangre en la cama. Qué diablos? Las ignoro pues no me importan en este momento y comienzo a
tomo uno de sus pezones con mis labios y com
ido salir de su garganta. Y mientras la poseo, esta vez tomándome mi tiempo, mientras succiono sus pezones, los
oseo una y otra vez, haciéndola mía por completo durante la noche, escuchando sus leves gemidos y d
enos mientras beso y succiono su cuello y en un arranque de placer mordí su hombro mientras me derramaba en ella regando su v
er, por lo que debería irme. Me muevo un poco y me doy cuen
n arranque de pudor tomo sus bragas y se las coloco, así como también recoloco su ca
hijo y no te preocupes no voy a quitártelo, desde anoche eres mi mujer y siempr
io tras recoger mi pistola y voy
atura de la calefacción anoche tras
ballenas, me aseguro de que el departamento quede bien cerrado tal y como lo en
casa, est
eñor