Relatos cortos
r mi labial y aliso un poco mi cabello con mis manos. Rocío solo un poco de mi perfume favorito en mis muñecas y ot
mergencia con algunos clientes y es posible que llegué bastante tarde, no me esperes despierta». Sin poder evitarlo, las lágrimas acuden a mis ojos arruinando el maquillaje que con tanto esmero me realice
pudo olvidar nuestro aniversario?», desde hace varias semanas venía planeando esto, salí antes del despacho pa
que me devuelve la mirada en ese espejo de cuerpo completo, vestida con un hermoso vestido negro ceñido a mi cuerpo y resaltando mis atributos una loca idea se me cruza por la cabeza. Arreglo mi maquil
unta el chofer diez minutos después
pueda ahogarme en alcoh
tante bueno, se llam
s ese es
ctor me comentaba se ve bastante agradable el lugar, espero unos minut
le, por favor -
noche las lágrimas inundan mis ojos, en uno de los palcos veo a Jack y no en compañía de sus dichosos clientes, en sus piernas se encuentra una chica pelirroja un
botella
ta el chico en cuanto de
de bodas, tu marido te mienta cínicamente diciendo que tiene una junta co
a imbécil -res
ue me tiende el chico y se lo acepto-, ¿cómo te diste cuenta de que lloraba
su mano un vaso de whisky y su mirada se ve perdida-, también es por mal de amores, -lo observo con la ceja arqueada por lo que se explica-: en la mirada de las personas te das cuenta, es muy fácil, es com
or, he decidido encarar al infiel de mi esposo y a la zorra con la que se encuentra. No he avanzado ni un metro cuando siento que mis piernas me fallan
a-. Ahora, si me disculpas, debo de encarar al malparido de mi marido y a la lagartona con la que
sas hacer? -pregunta con una voz tan va
-ante mi comentario comienza a reír y niega con su cabeza-, ¿ahora si podrías soltarme? -le pido cuand
con la misma moneda? -susurra en mi oído pa
es -respondo ladeando un poc
mujer como tú, ¿por qué no hacerle lo mismo?, eres una mujer sumamente her
convertiré en a
, ¿por qué deberías de guardarle fidelidad cuando é
tal parece que esa escena se ha quedado grabada con fuego en mi retina, una lágrima vuelve a rodar por mi mejilla cuando estoy por limpiarla con
o me toma por el cuello para después besarme con desesperación, dejo en la barra mi botella de tequila y envuelvo mis brazos
e la tela de mi vestido sin importarle que las personas nos estén observa
bien -murmura sobre mis labios, me limito a asentir y de in
onista para pedir una habitación, mientras yo miro todo a mi alrededor, tentada en retractarme de mis actos y huir de aquí como la cobarde que soy, pero también esa vena vengativa me oblig
encierra entre sus brazos y la pared de metal-. ¿Cómo te llamas? -inquiere
e hoy -respondo conteniendo un gemido, cuando siento como su eno
completos extraños, pero éste extraño te hará tener los mejores orgasmos de
mi mano y caminamos hasta una puerta casi al final, pasa una tarjeta magnética y me permite pasar primero como to
e los amantes pueden verse al fundirse en el fuego de la pasión, una pared de cristal deja a la vista un enorme baño con jacuzzi, en el extremo
lo de mi oreja, al tiempo que sus manos deshacen el nudo de mi vestido, el cual resbala por mis piernas después de unos segundos dejándome solo en brag
adeza para después pellizcar con sus dedos mi pezón, mientras su boca devora con fervor mi otro seno, yo por mi parte no puedo
e lo hicieras -comen
hábil boca en mis senos y continuar su dulce recorrido por todo mi vientre, sus manos se enganchan en mis bragas las cuales retira con delicadeza al igual que mis sandalias y me recuesta con sumo cuidado
ándome unos cuantos gemidos de satisfacción, estira su mano y poco a poco acaricia desde mi vientre hasta llegar a mis senos, apr
aumenta al mismo tiempo que su lengua se sumerge por completo en mi interior y la sensación de estar siendo fol
así -confieso, mientras jalo de
ándose solo lo suficiente, para después continuar con lo que estaba haciendo, succionando y deslizando su lengua con tal
ste? -inquiero con
me de pie y me lleva hasta el centro de la cama es que al fin comprendo sus palabras, comienza a desnudarse y sin poder evitarlo mis ojos
to sus calzoncillos y puedo apreciar los atrib
na sonrisa ladeada y como si estuviese hipnotiza
osicionándose detrás de mí, se sient
omo yo, con su otra mano recorre mi cuerpo, deteniéndose cada que siente como mi cuerpo vibra ante su toque
o en cuanto siento como sus dedos se adentran en mi intimidad, suelto un p
a cabecera de la cama, sosteniendo mi peso entre sus fuertes brazos, hago lo que me pide y u
rnas para tener mejor acceso a mi intimidad, dejándome totalmente ex
por el engaño de un hombre -comenta besando el largo de mi cuello, mientras con una de sus manos acaricia mis senos y la
se anidan en mi vientre y mi cuerpo se estremece ante el inminente orgasmo que está por azotar
e que quiero que veas c
por el placer, mis mejillas se tornan carmesí y de un momento a otro lanzo un gemido tan alto dañando un poco mi garganta cuando sus hábiles dedo
me gira de tal forma que ahora su cuerpo se encuentra sobre e
anta con tal agilidad hasta encaminarse a donde se encuentra su pantalón, s
ayudo -
bre su miembro, ante mi roce suelta un pequeño gruñido, cuando termino de colocárselo, me a
levanta y me acomoda en cuatro sobre la cama-. Sostente de la cabecera, te aseguro
por toda mi espalda desnuda hasta llegar a mis glúteos, donde suelta una pequeña palmada en cada
s caderas a su pelvis tanto como puedo y cuando se da cuenta de mis intenciones, profundiza sus embestidas de tal forma que mi espalda se arquea de forma involuntaria y mis nudillos se ponen blancos cuando mn alrededor de su miembro, el cual continúa golpeando brutalmente mi inte
propia liberación, me gira con un ágil movimiento, dejando mi espalda
labios entreabiertos, baja su boca hasta mis senos y muerde uno de ellos tan fuerte que me provoca un poco de
lero con el que llegue?
mos a esta habitación, lindura. Ahora quiero que te corras
diendo mis labios para no g
es, solo dame u
placenteros, por lo que mi cuerpo responde a sus palabras sin ser consciente de ello y me dejo llevar por esa agradable sensación y
ondón que acabamos de usar, acaricio mis senos los cuales se encuentran sensibles y estoy segura de que en alguno de ello
, pero estoy agotado y creo que el alcohol que ingerí ya me está cobrando factura -me confiesa mordiendo el lóbulo de mi oído a
al no saber si tomar mis cosas e irme de aquí o descansar un rato, cuando estoy por levantarme, coloca la colcha sobre nuestros cuerpos
e las palabras se han quedado atascadas en mi garganta sin razón alguna, después de todo lo que hicimos no debería de sentirme así, pero en mi vida me había aco
erme profundamente como bebé, me levanto con mucho cuidado y miro el reloj en la pared el cual marca que son las cinco de la mañana, tomo mi ropa y comienzo a vestirme tan rápido como mi adolorido
ho, me gustaría volver a verte, pero creo que eso será imposible. -Tomo mi bolso y salgo de la habitación sin hacer ruido, una vez a