Amor por un adulto

eléfono sonando y me

e que contestes-, dice Be

a arrastrando los pies y me dirijo al baño. Tengo el pelo grueso y enr

s. Dijo que no le respondías-. Me sorpr

una especie de p

dos nunca

breve

o el cepillo en el suelo y me agacho, volteando mi cabello sobre mi cabeza para agarr

a, oigo el pitido de

ué se

e vuelta al dormitorio para

con Hunter Simmons y se puso celoso-

la radio resuena en el altavoz. Be

recoja?- Sabe que Dean normalmente me lleva

. Acepto su oferta antes de

más información en cuanto entre en el coche

me río al ver cómo Luke es empujado al asiento trasero. Supongo que

. Le devuelv

zada y baja el vol

que aún tenemos una hora a

con la

germe, tengo que

amen cuando quiera, pero Dean siempre

un gesto para

nuestros problemas-. Mientras d

son

nes problemas-. Re

ar y vuelve a subir la música mie

lo todo. Mientras hablo, noto que Luke le pone la mano en la rodilla por debajo de l

ntinúa con tu historia-. As

bre el tema, pero est

ee con quién no puede est

a un ligero puñet

-. b

ivia ver que Dean no me está esperando e

se dirijan a la clase y me concentro en abri

oír la voz de Dean, sin darme c

cierro la puerta de la taqui

usto cuando digo eso suena el timbre

hablar aho

pir

ue no quiero met

o estabas-. Le miro y me doy cuenta de que tiene o

a de libros en mi

o...-. Me doy la vuelta para irme, pero su b

ente, es tan frío que me produce escalofríos. Nunca

de. En lugar de eso, aprieta

me estás h

agarre pero aún

est

. Morgan en la entrada con la puerta de su aula cerrada

muñeca para enfriar la sensación de ardor

junto al señor Morgan

le dice que se siente delante por hoy. Entonces me mira por un segundo. Hago contacto visual

zo por olvidar lo sucedido y prestar atención. Cuando termina

por favor, quédes

detiene

e él, negando con la cabeza. No le ve

rra la puerta y se dirige a mí. Me dirijo a su me

a examinar mi muñeca. El Sr. Morgan me toca ligeramente, haciéndome estremecer. No debería dolerme tanto,

ar la manga. -Ha sido un accidente,

enta el señor Morgan,

n paso

ntención-. Dean nunca había hecho algo así. No

an suspira

Promete. Asiento con la cabeza: -En cuanto a ti, vuelves a estar castig

? ¿Po

n se encoge

to a lleg

n lo hi

damente de la habitación. Por suerte, Dean no me está espe