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Huyendo Del Pasado

Capítulo 9 Eres tú

Palabras:2105    |    Actualizado en: 02/02/2023

e los malditos árboles del pueblo durante días, a pesar de que solo habían pasado unas pocas horas. Los otros en el grupo habían

rgía de su magia los pusiera de pie les estaba pasando factura, y finalmente admitieron que tenían que detenerse para descansar. Acercándose bajo algunas ramas bajas, Vicent se recostó en s

frontera?- Preguntó Vi

os por la noche tenemos una noche de pub para todos los oficiales fuera de servicio con música y algunas veces bebidas en el lío. Je,

acudió l

todo lo q

liento mientras m

ontacto físico. A veces es difícil, V

mientras se quitaba la máscara y colocaba u

inhalación. Había comenzado a amar la forma en que el humo se enroscaba en el aire desde el extremo

rió mientras se levantaba- A

osterior de su guante. Suspirando exageradamente, recogió su bolso. Los viejos sentimientos huecos

X

vista d

aba entre sus dedos entrelazados, co

sentimientos aún estaban mezclados al respecto. Tenía que entender cuán profunda era su pérdi

ra que no fuera guapo, porque lo era y tenía la certeza de que era el hombre más atractivo del lugar. Simplemente no parecía correcto y dejar que llegara tan lejos como lo hizo aquel día, hizo que ella pensara

as se sentaba frente a ella- Las cosas van bien con las conversaciones, espero que no haya víctimas por un tiempo y también que hayan disminuido las patrullas, pero aún soy cauteloso. Quiero preguntarte cómo c

onal médico están bien entrenados y calificados para el trabajo. Son solo

or los alrededores del lugar y veré si han llegado. Estoy interesado en ver a quién tenemos- Javier se levantó del banco con u

que era hora de sacar la documentaci

fuera como Luis cuando obtenía la

X

o comandante en la espalda mientras lo conducía hacia la tienda en la que ahora

intió co

ienda de Vicent. No era una mala carpa en absoluto, y estaba justo al lado de la carpa de su amigo. Era lo suficientemente grand

las dieciséis y media. Vicent, llegas 15 minutos tarde para eso, y te advierto, ella estará enojada

cent desabrochar su bolso negro y saca

cosas que llevar allí,

ayas terminado- Javier agregó antes de

zaban a caminar a través de la multitud de viviendas d

y planificación- Luis sonrió maliciosamente- Y si llegas tarde a tu

je hacia la tienda médica mient

hel S

puesto de Vicent, y la comprensión se apoderó de él- La conoces, ¿no? Lo olvidé, ella

e la persona en la que se había convertido. Lamentablemente, fue la última vez que la vio antes de una larga misión atrincherándolo más allá del occidente. La noticia de la muerte de Samael había llegado tarde, unos 3 meses después para ser mas preciso. Para cuando regresó al pueblo, el nombre de su ex alum

ver el paquete envuelto de chocolates y una car

hombres permanecieron juntos en silencio, y pudieron ver a la joven luchan

nas cosas interesantes

aún rebotaba con sus palabras, y él sacudió la cabeza ante la obsesión oral de su amigo.

ías dejar de traerme cosas cuando vayas allí, todas tus novias se

liver- Le entregó el sobre mient

y parecía más vieja, solo un poco, pero lo suficiente como para que él pudiera verlo en su rostro. Su sonrisa también se

ces- Luis retrocedió un poco cuando Ra

ntró en el hombre de cabello plateado frente a ella, y su expresión cambió al instante. Sus

eniente- Luis se acercó al comandante y se sorprend

nado que reaccionaría a alguien así, pero lo hizo. Podía sentir algunas lágrimas calientes que se abrían paso hacia las comisuras de sus ojos mientra

- Una gran sonrisa floreció en su rostro, y si hubiera sido capaz de apartar los ojos del enmas

acío en su alma y del cual estaba tan acostumbrado, pero su reacción lo golpeó con fuerza. No se imagina

logró hablar claramente, obligándose

sonrisa poco común se mantuvo congelada en su rostr

y le puso la mano en el hombro, apretando

izaron por sus mejillas, pero a ella no le importó. Una parte de su vida había regresado, y extrañamente, estaba

sonreír ni una sola vez. De todas las veces que regresó del pueblo, llevándole sus pequeños detalles de su casa y cartas personales, nada la había complacido

l pensar que tal vez esto e

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1 Capítulo 1 Despertar2 Capítulo 2 No hay razón para volver3 Capítulo 3 Iré a la frontera4 Capítulo 4 ¿Hace cuánto no regresas a casa 5 Capítulo 5 Se acerca un cambio6 Capítulo 6 Nuevas órdenes7 Capítulo 7 Cambio de escenario8 Capítulo 8 Duele9 Capítulo 9 Eres tú10 Capítulo 10 Reencuentro11 Capítulo 11 Emociones12 Capítulo 12 Yo me encargo13 Capítulo 13 Derrota14 Capítulo 14 Calor15 Capítulo 15 Feliz de que estés aquí16 Capítulo 16 Movimiento17 Capítulo 17 Quieren guerra18 Capítulo 18 Falta de tacto19 Capítulo 19 Paz y fuerza20 Capítulo 20 Negando la verdad21 Capítulo 21 Tiene mi apego22 Capítulo 22 Emboscada23 Capítulo 23 No voy a perderla24 Capítulo 24 Debo alejarme25 Capítulo 25 Me está evitando26 Capítulo 26 Es complicado27 Capítulo 27 Desespero28 Capítulo 28 Confrontación29 Capítulo 29 Beso30 Capítulo 30 Me quedo contigo31 Capítulo 31 No esperaré para siempre32 Capítulo 32 Razón para vivir33 Capítulo 33 No esperaba verlo34 Capítulo 34 Lo he decidido35 Capítulo 35 No es lo que esperaba36 Capítulo 36 Reunión amarga37 Capítulo 37 Todo por ella38 Capítulo 38 Mañana radiante39 Capítulo 39 Solo cuídate40 Capítulo 40 Intercambio41 Capítulo 41 Le debes una disculpa42 Capítulo 42 Regreso43 Capítulo 43 No quiero a nadie más44 Capítulo 44 Dulce compañía45 Capítulo 45 ¿Vas a volver 46 Capítulo 46 Pertenencia47 Capítulo 47 Enfrentamiento48 Capítulo 48 Despertar49 Capítulo 49 Ve a casa50 Capítulo 50 Juego51 Capítulo 51 Cosas nuevas52 Capítulo 52 Quiero que vengas conmigo53 Capítulo 53 Última noche54 Capítulo 54 Hemos regresado55 Capítulo 55 Se la llevaron56 Capítulo 56 Acuerdo57 Capítulo 57 Lo haremos a mi manera58 Capítulo 58 Perdóname59 Capítulo 59 Milagro60 Capítulo 60 Te lo contaré todo61 Capítulo 61 Despertó62 Capítulo 62 Embarazada63 Capítulo 63 Final64 Capítulo 64 Epílogo