TRISTEZA
ES LA SEGUNDA PSRTE DE "AGONÍA" TODA LA HISTORIA NA
ASI, NO OLVIDES DEJAR ALGUNA RESEÑA,
**********
tornado a la habit
sa, llegaré tar
se quejó ella mientras acomodaba su cabello en
ña frunció el ceño mostrando enojo- Apresúrate por
hora marchémonos antes de que lle
tarde también - rodó los ojo
nda, es posible que me cruc
- llevan tres meses siendo novios, tú me lo dij
ada- dejo escapar un pequeño gritito- es el hombre perfecto,
jamás tendré una nota perfecta, no tendré mi beca y mamá me matar
rmanas Castillo eran muy unidas, tenían una relación bastante sólida a pesa
ios y finanzas. Iba a mitad de pasillo cuando sintió que unas fuertes y masculinas manos rodea
ancisco
dios. Al principio pensó que se estremecía solo por la novedad del noviazgo, pero o era cierto, con cada día que p
s y se encontró con aquellos hermosos ojos verdes, que tanto insomnio le causaban. Cada vez q
idad?- le mostró una hilera de perfectos dientes blanco
a- ya les he dicho a mis padres
s deseo- Los labios de Lisa temblaron, aún antes de ser tocados por los de Luis Francisco. No les importó cuantas personas pudieran estarl
el que fuese a disfrutar en toda su vida. Sintió como el calor
día de hoy- ella le miró con ojos cargados de deseo, pero de nerviosismo al mis
seaba
bía deseado a
internamente se creía incapaz d
us verdes ojos le
rme, él la besó velozmente, la tomó
la clase
e quería, solo que estaba muy nerviosa- había tenido novios, pero con ninguno había lleg
pleno placer al sentir como esa boca le besaba en la curva del cuello. Las manos viajaban por debajo d
anos de él subieron para ocuparse de su blusa y entre besos y car
erró a los hombros de él, buscando apoyo es su musculoso cuerpo, pues sintió que pronto caería al piso sin poder evitarlo. Pronto se encontró rodeada de aquellos fuertes brazos, siendo elevada y luego depositada en la amplia cama. El co
a extremada
chos, en su cintura, en s
d separó sus muslos,
ó con voz agitada. É
estará
o experiencia de nin
sus ojos se llenaron de ternura- Todo irá bie
oder. . .
ró sonriendo-
ondió sin
besó la frente- no debe
relajarse bajo sus besos, entonces comenzó a dejar
La había hecho suya tatas veces en sueños, y en su imaginación que tenerla tangible y palpable entre sus brazo
vientre, ella se estremeció. Sepa
que no sepa, no soy tan tonta,
Aquel tesoro que aún no había sido tocado, y se juró para sí mism
ntro de placer y ell
agitaba sus caderas. Tuvo que tomarla con
cuan receptiva podían ser sus partes femeninas. Besó, acarició con la lengua, lamió
con fuerzas mientras su cuerpo entero sudaba y vibraba. Luis Francisco salió de entre sus
res co
se imaginada lo que sentiría cuando él estuviese llenando por completo su ser- volvió a besar
bedeció, Luis Francisco acarició sus
no sé qué hacer- l
udaré- le
ervios habían regresado a su cue
te modo tú podrás controlar la profundidad y la velocidad. Tu decidirás
acerlo- casi se
ás el ritmo. Si estas abaj
e si seguían discutiendo, perderían la ventaja que el orgasmo de Lisa les hab
as se
isa y las apoyó en sus propias caderas, luego la tomó del trasero, logrando así elevarla un poco. Se posicionó c
nicio preciosa, pero luego
e sus labios. Luis Francisco la miró quedándose completamente inmóvil. El rostro de ella se fue relaja
a en ella fue mayor. El ritmo del cambio, ya no era delicado, sino bastante pasional, la pasión suplanto la
masculino cuerpo que la hacía suya. Él ahogó su grito de placer, con besos
**********
o. Su hermoso vestido amarillo se ajustaba con perfección a su cuerpo. Su
dedor, esperando la llegada de Luis Francisc
ba sonriendo y con una botella de vino en sus manos. Sin pensarlo se arrojó a sus brazos, rode
amo- depositó un cas
más. Adelante, te e
ron a aquell
es- saludó L
ellos son mis padres. Y esa princesa q
cabo entre risas y alegría. Luis Francisco, se había ganado el corazón de su fa
añó, y le miró frunciendo el ceño. El an
Qué quieres compa
ño, sé que quizás sea muy pronto para ti, pero yo no tengo ningún tipo de dudas, esto que siento es a