Un Trato sin Amor
ado con de asistir a todas las citas
mi madre con cansancio-, vamos a sentarnos
os a una cafetería que se encuen
omo del brazo para cruzar la calle-. Aprov
aran hasta el lugar. Una vez entramos al establ
ir tantas harinas solo pide un sandwich, pero este es con pan integral junto a un jugo de mora. Por mi parte pido sandwic
en su chequeo. El doctor recomendó hacer ejercicio a dia
sa su mano sobre la mía-. Últ
eso. -acaricio el dorso de su mano-. Con un
ras, pero no insiste en seguir preguntando, sabe que no vo
a nosotras viene siendo parte del almuerzo. Lo sé porque justo frente a m
la chica para que traiga la cuenta, pero
celar la cuenta. -aviso para
aré esperando. -afirma con una
entos hasta lleg
enta? -pregunto a la espera
a. -responde mientras ve detrás de mi espald
én se pueda tratar. Frunzo el ceño y giro para ver en dirección hacia donde ella lo hace y me l
stá vestido con traje azul? -pregunto enarc
smo, s
er tropecé al salir del ascensor en el hospital. No puedo per
r el monto busco en mi cartera el monedero para sacar el dinero. Decidida camino
isculpe usted, pero la señorita me acaba d
-. Así es y espero no lo tome a mal, pero solo quería disculparm
que su nieto. -me encojo de hombros restándole importancia al asunto-, pero lo que no puedo aceptar es que
mano para no aceptar el dinero-. No te voy a ac
rendirme y no seguir insistiendo. Este hombre es testarudo y no acepto el dinero
gresar al lado de mi madre, quien ya estaba con la
tanto cariño? -pregun
re. -miento para que no comience a
oy siendo sincera y sé que luego tendré que contar sobre lo ocurrido-. Va
ontraba sentado el señor. Me doy un golpe en la cabeza por no haber tenido la e
de su nieto, tal vez es tan patán que seguro dejo a su abuelo solo e
y poder tener la oportunidad de ver al señor nuevamente para presentar
cafetería e ir rumbo a nuestra casa para que ella pu
r taxi que pasa, ayudo a mi madre a subir y cuan
no recuerdo si fue en la silla
nrío para luego pedirle al tax
egar a la mesa donde estábamos me doy cuenta de que no está
e el lavado y lo tomo. Por gracia divina mi vejiga pide ser desocupada y entro hasta el cub
uien. Levanto mi mirada para disculparme con la persona, p
ogancia enarcando una ceja-. Al
mi culpa encontrarme co
úa de la manera que menos lo esperaba. El muy imbécil me besa
béc
ntes de salir corriendo del lug