Como agua para chocolate
.
entemente fuerte como para que no se le notara el morado en la cara y además unos lentes oscuros que la ayudarían a disimular mucho mejor la cara que ten
alir señora? ¿
inar un rato y a respira
é le digo? Porque de seguro me va a p
unos segundos pensat
que salí y punt
ndo ya estaba a punto de sal
nde va? Porque si no le digo al señor ent
el golpe que tenía en la cara era más que suficiente para
e salí y punto. Yo no tengo porqué estar diciendo a cada mo
llegó al jardín venía entrando un hombre bie
a Susana,
a conocido a Colate, de quien se enamoró perdidamente y terminó casándose con él, dejando a Jorge con el corazón totalmente roto. Luego con el tiempo, él también se casó, con una mujer muy ambiciosa, que además nunca le dio un hijo y al igual que Susana continuaba casado aún por costumbre, por miedo a la soledad, pero definitivamente era un matrimonio sólo de apariencias. Siempre estuvo
a pesar de que los lentes oscuros que traía eran bastante grandes, en la parte de la boca se veía
sorpresa! ¿Y qué haces por
tás bellísima bueno como siempre.
ntenía muy bien, lo único era que siempre vestía de forma conservadora, pero
para que no se diera cuenta del golpe y eso hizo que Jorge se concen
sana ¿qué te p
uso nervios
da grave, estoy bien. Pero cuéntame ¿A qué vin
e alguna manera era un hombre que no trataba muy bien a Susana, pero nunca pasó por
infancia, sabes que puedes confiar e
esto podía traer un conflicto mayor y lo menos que querí
ó que de seguro Colate no lo volvería a hacer, enton
en el baño y ya sabes como se ponen
embargo para no presionarla y evitar un malestar en el momento,
no que te viera un médico porque esas ca
o el tema abrup
y no me has dicho ¿qué te trae por
aerte unos documentos que es necesar
mentos se refería Jorge así q
esos? No comprendo, además mis
o autorización para que te trajera hoy mismo los documentos, porque estaban en mi poder desde hace varias semanas, pero estaba es
que Colate había pasado la noche fuera y lo más seguro era que apareciera en cualquier m
ue hablemos con calma, es que quiero respirar aire p
a solas con Susana aunque sólo se tratara de algo profesional. Pero él en el fondo si
tomar un café mientras te explico de qu
í me par
e estaba casada con Colate, se había acostumbrado a vivir sólo para él, olvi
.
la empresa del pad
ontró con una puerta que tenía un aviso que decía: "Papelería y almacén" al ver
o lejos escuchó una
lante, est
y d
o José Alberto Velásquez, necesito sacar varias copias de estos documentos, tienen que ser en
esto que no conocía a Paulina y además al parecer no le habían
l departamento de papelería, la fotocopiadora la t
mano y sin saber qué hacer, puesto que e
aso las copias
sonrió y
ta que el dueño se digne a comprar una fotocopiadora para cada piso, de manera que no tengan que estar brincando de un departamento a otro. A
o para tener a los empleados trabajando cómodamente, no tenía sentido que siendo un edificio de varios pisos, sólo tuvieran una fotocopia
dió al comenta
a cómo usarla? La verdad es que no teng
le dijo
erecha, presionar este botón verde, luego colocas las hojas en el mismo orden q
y se quedó pensativa por un
fícil puede ser sacar una simple
tás aquí, voy a buscar un café y
demás tengo que sacar todo este lote de hojas, así q
una cantidad que sobrepasó el límite que soportaba la vieja fotocopiadora, al presionar el botón, la máquina comenzó a funcionar bien, sacando en orden y una por una las copias.
to un ventilador y al mismo tiempo trataba de apagar la fotocopiadora para que no siguiera expulsando los documentos or
hago? Rayos ¿cómo detengo est
como introdujo tantas, se quedaron trancadas en la máquina. En ese momento entró Yajaira co
oss! Hay que parar esa máquina urgente o si no vamos a t
lo único que hice fue introducir aquí todas esta
zón la máquina está loca y no se puede parar, le
ntinuaba disparando por todas partes las hojas, qu
aber alguna forma
formas, pero la máquina estab
de pronto comenzó a pegar chispazos que hicieron que ambas chicas comenzaran a gritar, pero en un i
ralizó esta máquina del demo
ra ag
bién apagaste toda la empresa. Y ni hablar de toda
aulina estaba tratando de recoger todos los documentos del arquitecto que estaban regados por toda la oficina. Ahora había