Salvando Nuestro Amor
AE
os uno del otro; todo parecerá distante. Es verla ida de este mundo mientras mueve la comida de un lado al otro del plato y querer preguntarle qué le sucede, pero los recuerdos de él besándola y
te obligue a comer. - Hablo con autoridad, y de inmediato esos ojos
o desafiante -En todo caso serán nuestros hijos,
s la única razón por la cual tú
guerra conmigo mismo. La odio por lo que me ha hecho, pero soy demasiado
a que de repente ella se pone de pie y prácticamente sal
o tiempo morirme por estar cerca de ella? ¿Cómo me puede doler tanto lastimarla cuando ella me ha lastimado de una ma
lo. Su mano intenta apartar la mía, pero se rinde ante la necesidad de volver a volve
mi mano para ayudarle a ponerse de pie, ell
las que tengo con ella junto a Pedro en aquella cama, y por esta puta nec
ayudo a ponerse de pie. -Gracias. - Dice de manera
nas al límite con sus glúteos y aquí estoy yo siendo el hombre que siempre la deseo. No puedo controlar lo
ntentando encontrar una lógica a esta guerra interna que llevo
de esas noches donde ahogué mis penas en alcohol en aquel bar a pocos minuto
lón donde guarde su tarjeta. Busco en el bolsillo trasero
az de serme infiel, ¿
y rápidamente m
onde a los p
, ¿Pa
Quién
rdas?- Pregunto
Sabía muy bien que me ll
limito a decir y
vamos a algún sitio tranquilo a conve
rfectamente lo que quiero.- Expli
onces, te enviare la d
un rato.- Le informo
ás... No puedo quitarme la imagen de Pedro y Serena