Una madre en apuros
huesos con cada palabra que me decía. Si hubiera sido al inicio, cuando recién empezaba con este trabajo y no sabía lo duro y directo que era mi jefe, yo me hubiera p
erte de su perfume, que solo se percibía al acercarse, solo lo había olido un par de veces, pues él nunca se acercaba tanto a nadie.-Este es tu trabajo y resolver mis necesidades
inutos, por eso me aventuré a ir. Pero
Susana no es la que me asiste! ¡Eres tú! Y que faltes a tu puesto es una falta muy grande, Camila González.-a veces me causaba gracia cuando decía Camila González con aquel tono de extremo enojo, pero hoy no era el caso, hoy estaba triste, v
que ir casi corriendo detrás de él. Bajamos del ascensor y el chofer nos esperaba con la puerta abierta,
ue tenía que saber yo, no él. Saqué mi móvil e hice varias llamadas para saber si el horario del almu
seguía su ritmo, mos
ente a mis ojos, salieron unas estúpidas lágrimas. Justo en aquel instante él giró su rostro hacia mí, abrió sus
hablo fuerte cuando
, señor. No es
stando su brazo a la puerta, dejé mi mirada en la ventana para que al me
? Ahora sentía que no solo mi mundo se derrumbaba, sino que yo era una idiota, por creer en cada palabra de
ión sólida que nos estab
ría saber nada de Tommy o su amante, él no
os de la boda, todas las invitaciones
do se ca
ada era real, pero claramente vi el pene de Tommy salir de aquella mujer, sus cuerpos desnudos en pleno a
orreo, er
? ¿Le digo? ¿Qué es lo que ha pasado? Camila, parece muy desesperado y dispuesto a armar un escándalo por
a que no llamar la
cina lo encontré con otra mujer. ¡Dale un puñetazo por mí! ¡Patéale las bolas y luego pide que lo saben de allí como a un
ando que le dije que no
olpeo y hago que lo saquen, como
as un es
rde.
nta que ya el coche se había detenido,
s disculpas, lo veía en las arrugas que
mos llegado siete minutos tarde, lo que complicaba todo para mí. La mir
y era muy severo con los que no eran puntuales, llegar tarde era una
extendió para pedirme un folleto que yo debí traer, darle uno y luego repartirlo ent
todos se me quedaron mirando a espera de que hiciera o dijera algo, pe
ir ningún sonido. Él se puso
a cuando estaba enojado, ahora estaba que echaba chispas.-pero temo que no podrem
ndo cosas mientras él pedía disculpas directas a c
ía en este trabajo, era la primera vez que había cometido un fallo t
o en mi garganta y aunque quería recurrir a mis lágrimas para pedir perdón mientras llo
de mi vida, eso
a alargada mesa, solo estaba y
no, que sea válido para lo que ha pasado
e y al mismo tiempo c
uedaba
decirle l
a ver a Tommy,
s rápido y no viniste preparada.-s
cina.-el rostro de él ni se inmutó, solo miró ha
esa y recoge tus cosas. No tienes ni que terminar el día, te quiero lejos de mi empresa y de todo lo que tenga que ver con mi trabajo, han sido muchas mis toleran