Las Anas y el Ceo
ita la habitación de su hijo, Gabriel Antonio Márquez Mallorca, quien duerme plácidamente, luego revisa el cuarto de su hija Gabyana Ma
se retira a su habitación a descansar mientras escucha llover con fuerza; en horas de la madrugada ingresa a su cuarto un hombre, con
sada por favor --, pero él la sacude más fuerte y le dice en voz alta – He dicho que te levantes --, ella se despierta se sienta en la cama y le responde --
y drogas simultáneamente, se le acerca y le rapa la manta diciendo – Quiero tener sexo ahora --, ella le responde –
.. para eso eres mi mujer... tienes la obligación de complacerme... para eso te mantengo ---, ella le re
el rostro, una vez, dos y tres veces, pero sigue resistiéndose, trata de escapar, pero él se saca la correa y la azota
dormido. Ella se arrastra hacia una esquina de la habitación en silencio, se cubre con la manta y allà se q
, que proviene de la vagina, piensa -- ¿Y esto que es?... ¿Será que me rompió algo por dentro?... debo ir al médico --. Luego se fue a la coci
cuando te tengo que decir que no me gusta la manteca... Es que eres sorda, bruta, retrasada, ¿Que no en
acá, todos los huevos y la grasa que a mà sà que encanta --, toma los huevos y el tocino de los platos de sus hijos y se lo
o – Mi papá te volvió a pegar ¿Verdad? --, se dirigió a su padre – Eres un poco hombre... un desgraciado, miserable... se te olvida que saliste de una mujer--,
y me obligo a eso... siempre es lo mismo... a las mujeres como ella hay que pegarles para que entiendan --. Ana Paula sin pronunciar pal
ntrar a la habitación ella dice –Buenos dÃas mamita, te traje tu desayuno--, la madre la ve y comen
or.... Pero divórciate ya --, Ana Paula responde –Pero mamita, como me separo de él, de que vamos a vivir. Quien pagará el estudio de m
issa Mallorca Castejón, su otra hija para contarle lo sucedido con su hermana. Horas después Ana Clarissa llama a su
en eso llega Ana Paula, sus hermanas al verla se quedan asombradas, una de ellas dice -- Dios mÃo... que animal --, la otra comenta –Vamo
s repito lo mismo que le dije a mi mamá, no tengo dinero para mantener a mis hijos, a mi mama y a mà misma, él es el que nos mant
biliaria, algo extra sacaras de allÃ--, pero Ana Julia interrumpe y le pregunta – Te pegó porque no querÃas tener sexo con él o ¿Por qué te hizo eso
responder interviene nuevamente Ana Julia – ¿Cada cuánto tiempo tienen sexo? --, luego también pregunta Ana MarÃa – Ya no quieres a Rodolfo --, Ana Paula resp
r de placer en el sexo y no sé a qué se refieren, nunca he sentido placer con Rodolfo que es el único hombre que he tenido.... respondiendo
ntario – ¡Estás loca! Ella es una mujer decente --, otra dice –Ana Paula no tiene que probar nada, solo se tien
andes remedios... respóndeme por favor, vente a trabajar en la inmobiliaria conmigo y reinicia tu carrera de Arquitectura --, ella respo
io de Rodolfo en la Agencia de viajes, le dice – Que madriza que le diste a tu esposa Rodolfo... eso no se hace... que clase de troglodita eres..
cita de porquerÃa... oye ¿Qué ley es esa? --, Bernard le contesta – No es posible que, en pleno siglo, un mero macho como tú, no te hayas