Papi mafioso y la dulce niñera
rí
borrosa, Dios, yo estoy en la casa del guapón y eso es real. Él es un criminal, recuerd
deshaga de mi cuerpo. Esa película la he visto y no quiero que encuentren mi cuerpo dentro del cubo
etanol, no sé cuánto voy a tener una ducha así a mi disposición. Me lavé el pelo p
Par
escalón y levanté las manos como un
eé con cara de to
? - Preguntó con
nta. Espero que su padre no esté en casa, quiero salir de aquí antes de encontrarlo o
e me invitó a desayun
ra una situación incómoda y espero que ella no pregunte na
esperaba, abrió una sonrisa hermosa al vernos juntas, tiró de la silla educadamente y yo hasta extrañé toda aquell
e en medio con los cubiertos y ser el hazmerreír de los dos. Yasmin parecía estar adorando mi presencia, ell
ué no me dijis
ó y ambos nos mir
cosas, Yasmin. - Nunca olvi
orque tú y mi papá son novios. Mi amiga de la escuela dice q
paz! - Por primera vez lo vi regañarla, creo que mucho más
r de este lugar, aunque esta no es mi casa y tengo mucho que hacer lejos de aquí.
tación, pero espero qu
a quedarme un poco más y sin saber que todo lo que quiero es salir
a gatita tiene haría soñar a cualquiera! Eso me hizo pensar en mí cuando era niño, lleno de preguntas sobre el pasado, algunas de
decoración? - Pregunté mirando algunos est
tener una madre o una madrastra, como mis amiga
parece muy agradable y
una trenza en mi cabello
claro qu
a mirándose en el espejo. Yasmin es supervanidosa
as una buena espo
i un beso en la cara y bajé las escal
sala y en cuanto me
á me d
eguntó interesado y l
que seas
a, Dios, no quiera ganar el
querer las cosas a tu manera. ¡Ahora le pe
romete que vendrá
¡H
pricho de la chica. Creo que le prometería que solo quería ir a cas
meto que vol
razo y miró dentro de mis ojos. Me sentí un poco intimidada y a
cuerdas d
empecé a estorba
hé lo que esos hom
y con la mirad
sa, soy yo, jura que no le dirás nada d
de él, pero aún n
ora basta, teng
- Le di mi número de WhatsApp,
ible, aún estaba cansada de todo lo que había sucedido. Quería o
i una notificación de
promesa que m
ás y ni pensar en lo que sucedió o podría haber ocurrido. Basta de
.
ra a alguien su verdadera identidad, pensaba en las consecu
cía tan frágil y asustada en sus brazos. Fue a la habitación en la que durmió,
tu nueva madre, pero es u
brir más sobre ella, había esa promesa hecha a su hija, ella tendrá que cumplir y v
lo a alguien, necesito mantenerla bajo
de allí, despertó con una fuerte resaca de sueño y alcohol, pensó en lo que había hecho con Marília al de
arse conmigo
aladar, miró sus mensajes y no había nada de ella. Ni siquiera un mensaje insult
era Marília, nunca bebería con