Una Muñeca para el Jefe
s cerrados, pero se que esta despierta, lo sé porqu
quí-digo acer
ariño, también sé qu
e no debería de sorprenderme, ella es un
ma de ese p
ontestar cuando mi
ora, soy el prom
o, pero me alegra saber que cuando muera, no que
cosas. -lo miro con cara de as
, señora quisiera que me diera la mano de su hija, a lo mejor n
res a
ro con m
onas mientes pero c
gran mentiroso y que me casare solo por
ejándonos a los dos tiesos, cuando logro reaccionar las maquinas comienzan a sonar como locas, Max sale gritando buscando a un doctor, entran las enfer
ha salido de la habitación, estoy hecha un mar de lágrimas, cuando de repente salen las enf
imos todo lo que estuvo en nu
tuviera en medio de esa confesión, siento unos brazos que rodena mi
er! -las lagrimas no dejaba
forcejeo hasta que por fin logro soltarme, entro a la
ida, no pude salvarte, debí esforzarm
a mi padre, gracias por la hermosa vida que me diste, me hubiera gustado mucho que conocieras nietos y comprár
si ensucio su hermoso traje azul tiene miles de esos, perder una madre no tiene explicación, no es lo mismo que cuando perdí a mi padre
lteo a ver a mi jefe nunca antes le había escuchado intentar recon
s, esto traería un atraso para mi hermana, me había costado mucho tranquilizarla cuando le conté lo sucedido, es que ella pasaba día y
pedido estar junto a papa y respetaría su memoria, el padre dio una pequeña misa, solo estábamos mi hermana y yo, cu
radecía muchísimo, estar sola en e
el ceño, sus palabras lo que me pone en alerta, aunque no quería f
ficiente para hablar con él sin que nadie escuche-¿
presentarte como mi prometida, no podemos p
sab
mismo, perro s
momento? la verdad es que Max no cambiaría, debo hacerme a la idea, es
a, tal vez era porque solo cargaba un pantalón ancho de vestir negro y una camisa cuatro veces
ometida, amor ellos son mi familia, y de aho
atearlo, así que disimuoadamente coloque mi brazo
pero quería conocer- Pensé que esta mujer era
chas pero como vera, acabo de enterrar a
esta manera, pero me cae muy
esas cosas pasa, l
ue no tenía dinero para pagar el autobús, ni siquiera sé si tenía comida en la casa, estaba en el limbo, y me costaría tiempo así. Max se estaciona al frente de
na a las diez, irem
mal-contest
uiero que estés tan fea para la foto
como si intentara aparentar algo que no es, a lo mejor mi corazón noble quiere creer que él es bueno, pero mi cer
añana, espero pued
a, mi hermana ya se encuentra durmiendo o inte
erta y sigo mi camino, al llegar al baño quito mi ropa y me meto a la ducha el agua fría logra
o quería recibir visitas, aunque tampoco teni
eñora Maritza? -Pregunta un ho
de quié
a familia Duncan el se
rdone pas
ara que se lo coloque mañana
uedo decir aún no he asimi
nos tacones de infarto, pero como nada es como uno quiere iba a enseñarle a este mequetrefe que conmigo no se jugaba, no me gusta que en digan l
ra de mangas bordadas y cuello tortuga, la verdad el vestido era entre feo y horrible, decido colocarme unas sandalias bajitas d