Debes obedecer.

ya no se verían reflejados en la aplicación hasta que la novela fuera contratada. Bueno lo modifi

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radable con su padre, para ser sincera ella lo c

a? ¿Acaso no compartían la misma san

e debía morir en silencio dentro de su habitación entonces el era un hombre de apa

amas?- susurro casi sin ganas mientra

o es digna

olgaría en su habitación como un trofeo, después de todo no la necesitaba. Era mejor q

o verte al igual que los arboles en el alrededor al mismo tiempo los

el cielo de forma melancólica y suspiraba de vez en cuando de forma desanimada, para ser una

rondando en su cabeza desde aquella noche y no la dejaba descansar en paz. Si tanto la

tanto y juraba que su padre era una persona buena una y otra vez. ¿Que hay de bueno e

que ve el a

da alguna pediría tener una familia feliz. No necesitaba una madre, despues de t

atura indefensa con el mejor asesino del i

a perfecta si su padre fuera uno que se la tomara en cuenta

eformada en cuestión de segundos. Ya no tenia sentido seguir pensando en el desprecio de su padre haci

cual pensar pues al parecer sus días de

se fue con una expresión sombría en el rostro, desde entonces, las veces en las que lo había visto eran escasas

buelo y pasea en el jardín de la mansión. No tendría que preocuparse por aprender ni pasar por difíciles en

abeza en forma de almohada. Movía su cuerpo de lado a lado mientr

deraría una amenaza y realmente la mandaría a matar pero, en dado caso de que eso no suce

todas las posibles que podrían suceder. Entonces

der... ¡Puedo hace

as veces como si su vida dependiera de ello. Si

o para ser reconocida entonces observaria si su padre cambiaría de actitud con ella pero, si no lo hacía ten

U

esto en su estómago en todo el día. El solo estaba apunto de ocultarse entonce

a servidumbre desapareció. Igualmente ya no había mucho que comer en la cocina. Agua, agua y más agua. Si

en varias veces le regalaba algo de comer pue

e ni actuar tierna e inocente. Todo eso lo hacía solo para que los demás no se dieran cuen

ño rápido y se dejó caer sobre su suave cama. De todo los momentos que pasaban en el día, est