Atentamente, tu ex esposa
su amiga que también estaba conmocionada, pero al mismo tiempo, le sonreía con alegría. Se giró para ver a Lucas
á casada –le explicó, pero Ali
la cabeza, luego suspiró– ya no. No más –su
ó? –preguntó
no dejaba de observarla. Había pasado de estar sonrojada y tímida a sentirse terriblemente incómoda. Su sonrisa había
cidido tomar caminos
trometa, pero tiene
ervada por Anderson– simplemente dejémoslo en que ella ya no será más una Vitolli –senten
na Greenswood –le aseguró Anderson con u
preguntó Alicia completamente confu
el dueño y fundador de es
de prisa intentando decir algo o siquiera reaccionar, pero estaba completamente en blanco. Sin embargo, no necesitó
otro beso en el dorso de la mano, luego se volteó para ver al médico y dirigirse a él– Lucas, atiéndela bien. No qu
ó para dejarlas conversar tranquilas. Le recordó a Camila que ellos tenían horarios y días de visita específicos, así que deb
apenas llegando y ya
sposa, pues lo menos que ahora quería era saber sobre matrimonio, pero no podía negar que le había sacado una sonrisa el saber que alguien se había senti
s como yo pensaba –le dijo a Cam
siempre ocurría, se habían olvidado por completo del tiempo hasta que una enfermera e
segura de eso –prometió su amiga dándole un be
olo tenía un pequeño susto por no saber cómo resultaría todo, pero trataba de mantenerse calmada, pues el personal había sido muy atento con ella y las cosas marchaban de la mejor manera. Por supuesto que sus malestares no habían desaparecido, pero estaba recibiendo algunos medicamentos básicos para ayudarla a no sentirs
da la clínica. Sin saberlo, poco a poco todo el personal había escuchado lo que ella estaba viviendo. La historia de que había logrado embarazarse luego de 5 años de intentarlo y ocurría al mismo tiempo que ha
la primera flor tenía escrita la frase "Una flor por cada día que has estado en mi vida" y así mismo ocurrió, cada día, sin falta, alguna de las enfermeras llegaba con un tulipán morado de parte del querido señor Greenswood. Alicia no tenía idea de cómo ese hombre había descubierto que esa era su flor favorita, p
s una de ellas a la hora de visita y todas estaban realmente felices al ver el cambio en Alicia, se notaba la alegría en su rostr
o lo con
a su propuesta de matrimonio. Alicia no podía evitar reír ante aquellas preguntas y por un corto periodo de tiempo, había disfruta
uiere saber de ti –le
con su secretaria! –exclamó Ali
paraíso –soltó con u
–quiso saber
ltaron ser tan buenas con doña garras –ese era el sobrenombre que Isabel le había puesto
o quiero saber de él –le pid
uscarte, es un idiota... pero me alegra que se esté dando cuenta que es un idiota –dijo sonriendo. Alicia no pudo evitar dejar
Cuén