Saturno.
nt
po de sonido en su habitación. Odiaba cuando ella lo hacÃa, pues cantaba horrible y me causaba un tremendo dolor
hacia el suyo. Al abrir la puerta, la encontré bailando como una loca encima de
staba escuchar. Quinn era mi hermanita menor, pues ella tenÃa diecisiete y yo habÃa cumplido veinticu
las personas que están en los cargos más altos, incluso, ni siquiera recuerdo si se trataba de un par de entrevistas o un
, corrió a apagar el equipo y me sonrió-Ya, ya, vete a dormir par
lce, a pesar de ser bastante determinada y aparentemente dura la mayor parte
colegio -señalé-Me molestaré si no te despiert
lor gris, acompañado por tacones negros muy altos y maquillaje muy sutil. Tomé mi bolso y todo
arado huevos revueltos, pan con mantequilla
Son más de la siete y media,
iferentes actividades -rodé los ojos mientras
s me di el lujo de contar uno por uno, ventanales limpios y personas entraban y
spondÃ-¿Puedo a
. Esta es una empresa que comercializa vehÃculos, y el nombre del jefe es Devan Reed. Es un hombre de negocios, muy inteligente y
iblemente, yo no estaba lista para eso. Jamás he tenido tanta responsabilidad sobre mis hombros y
ido ver lo inteligente que eres. Ya es momento que tú tomes las riendas, y seas tú directamente quien realice las entrevistas para la Editorial Kellog. La señorita Ivy está de acuerdo con
blar un poquito...-estaba nerviosa, tanto que mi cuerpo entero temblaba y mi estómago em
imple ni en lo más mÃnimo, sino que también deberás escribir un libro sobre la vida del señor Reed
del bolso; un par de cuadernillos, más de diez lápices, una grabadora de voz y otra normal
ial Kellog. Tengo una cita con el señor Devan Reed -le dije am
ce y golpee la puerta del señor Reed, en ella está su nombre
Qué tenga
ando el sonido que hacÃan mis tacones y sin más, golpeé dos veces la puerta que llevaba escrito "Devan Reed". Por cierto, creÃa que ese era un nombre bastante e
ro, me encontré con un caballero de alta estatura, preciosos ojos verdes, cabello
ra y tomé asiento en una de las sillas de su escritorio-Vengo de parte de la Edit
les. Qué imbécil, este tarado se cree más importante que lo que yo le estoy diciendo ¿Acaso no oyó que s
ernas para no perder la paciencia puesto que ni siquiera se dignaba a mirarme. Apenas acabo de conocerlo y ya lo odio, aunque tam
ron que últimamente habÃa tenido más de cinco secretarias en menos de un año debido a que con cada una de ellas mantuvo una relación llena de pasión que
sted, le comento que está muy equivocado -señalé molesta. Maldito Devan, maldito seas- ¡Debe prestarme atención! No soy u
y se acomodó en su silla. Frunció el
us profundos ojos me pusieron muy nerviosa. Quizá esa era la razón por la que conquistaba a toda
me cosas importantes o que han tenido relevancia a lo largo de su vida. La gente desea conocer quién verdaderamente es el hombre que está detrás del magnate y empresario, Devan Reed. No queremos que nos hable solamente de negocios, sino que nos cuente qué le gusta hacer en su tiempo libre, cómo es su vida cuando no se encuentra en la oficina, qué
hacer es como un lienzo al desnudo...-bromeó y se dio un instante para observarme de pies a cabeza. T
s de su fecha de nacimiento...Digamos que requiero de toda su informa
libro? ¿Es que acaso eso no lo hac
do la carrera de corrección de textos y la terminé a los veintidós, y apenas hace dos años estoy siguiendo de igual forma periodismo a distancia. QuerÃa especializarme en ambas
ón de la editorial, y bueno, ahora mismo también me encuentro estudiando periodismo y estoy por culminar la carrera -
a periodista? -Enarcó una ceja. Ya,
n de textos, pero, de igual manera yo también me encuentro estudiando per
pésima confusión y que si se ha confundido con algo tan crucial como lo es el área en la que se desempeña cegocentrismo que demostró tener en un principio. Lo admito, me he equivocado
d académico a lo largo de mi corta vida. SÃ, soy joven y me equivoco de vez en cuando, sin embargo, eso no va a afectar mi trabajo. Yo le aseguro que el libro será el mejor que haya leÃdo en los últimos tiempos y que las ventas serán extraordinarias. Soy firme y constante en
Ã, es decir, que tengan confianza en sà mismo -sÃ, se nota por lo egocéntrico que es. No necesita repetÃrmelo-Pienso que s
re una de mis agendas y verme ante él como una mujer intelectual. Luego del error tremendo qu
dÃas en lo que debo irme un poco más tarde -señaló viéndome a los ojos. Comencé a entender que a Reed le g
despedirme y abandonar la oficina en los próximos dos minutos-Muchas gracias po
o -respondió y asentà dándole la espalda y caminando hast
-Di la
guapa como usted, señorita Winter Howland -
paciencia. Idiota señor Reed. Creo que los siguientes meses al lado de este casanov