La novia virgen del rey
o que le dieron en la mañana, estaría en grandes problemas, pues no debía estarlo usando todavía, pero la tentación le ganó, además de que se quería ver hermosa en
o preguntó y no dejó de mirar
bra de un frondoso árbol, donde ató su montura a una de las ramas y s
ar unos minutos y no obtener ning
minutos más, estaba impacientándo
extraño que él no estuviera ahí, además
regañó el hombre, mientras saltaba las rocas una a una
e nuestro tiempo es limitado y esperar una seman
urró el hombre, aú
guntó Selene colocando su m
es propio de una dama -se
llevar por el impulso, porque él tenía razón y no era de damas,
incomodarte -se dis
par una suave y
res tú quien no quiere que hable con tus padres y h
e mordió
dado siempre y no deja que tenga ningún
tenerte encerrada en una torre y evitar qu
el rostro. La joven contuvo la respiración al not
asó? -preguntó Selene
e no llegó a sus ojos. Selene pudo ver, que det
avor, ¿qué fue lo que te pasó? -insist
... -du
primo,
y su
tentando evadir el tema, aunque ciertamente, sie
golpearte! -exclamó- ¿Quién se c
en su interior, p
ner que soportar su presencia todo el día en ca
itable, pues Henry lograba produ
una sorpresa por mi cumpleaños, es
ntre las suyas, provocando que la joven se son
ndome -dijo
ón que ella estaba teniendo, en es
una buena y honorable dama, Selene. Aun así, no puedo evitar sentir el des
contuvo la respiración cuando el hombre
y excepcional que he tenido la dicha de cono
que esa palabra no cabía dentro de lo
bre como tu esposo. Tengo miedo de que te quieran arrancar de mis
e nos conocemos desde hace mucho tiempo, que e
sobre los labios de
s, si tengo que pensar en dejarte -susurró acercán
roja, cerró los ojos y esperó al siguiente movimiento del hombre, mientras
la joven hasta colocar sus labios sobre los suyos. Fue un simple roce de labios, pero que hizo temblar a Selene de pies a c
nry
mo -c
jos y se cubrió la
a hablarte de est
su pecho y se quitó el broc
ijo sup
len
s me pertenecen, soy libre de obse
os algo muy especial. El diseño del broche en su mano era único, tenía piedras preciosas como circones, rubíes, pequeños dia
lo, Selene, esto
s lo único que puedo da
mbargo, no llegó a decir nad
s fueron haciéndose más y más insistentes, por
ara evitar que la gente d
bió a su caballo y salió con rumbo al castillo, estaba llegando con el tiempo sufi
entró como un vendaval
-preguntó Selene parán
ejada de casa los fines de semana? -cuestio
ienses cosas que no son -pronun
ncia -aclaró Robert Russell casi con ternura, pero quien lo c
je que realizar -señaló la madre, mientras llegaba a la pe
se detuvo y la miró con el ceño fruncido,
para el gusto de la joven -. Te advertí que no debías ensuciarlo y
ró a levantarse, para revisar que efectivam
tó escandalizada al no ver la got
e llevó su mano al pecho,
-la llamó e
n -respondió vac
a, no podemos llegar t
entre sus dedos, lo levantó y corrió a su habitación para coger el segun
e cuatro corceles blancos se estacionó f
-anunció el chofer del coche,
ue Selene. La joven se quedó de piedra al ver el imponente castillo, sabía que solo l
reguntó de
de acuerdo a la educación que nos hemos empeñ
ñal de obediencia, no quería dejar a sus padres en v
atados con reverencia en señal de respeto, algo que sorprendió
la familia real, personas de las que todos sabían, pero que los más priv
o que controlar su respiración, así como el calor en sus mejillas
habían detenido. Levantó el rostro y su corazón se detuvo al ver a Henry junto al trono real. La sorpresa y confusi
una reverencia y ella lo hizo un segundo después, desde donde no logr
castillo Astor. Permítanme presentarles a mi hijo, el Rey Frederick de Astor -dijo co
en su cumpleaños -halagó el padre de Selene -. Esperamos q
mó su madre y se hizo a
es era su cumpleaños, pero habían terminado en el ca
pero con una mirada seria y calculadora, además de la evidente co
tra hija, su futura esposa y