La obsesión del Mafioso Italiano (+18)
olencia las lágrimas que tontamente había deja
pone hi
ía comenzado a llorar pe
os permanecen fijos en mí
e lo que yo qu
esta de so
con fuerza y le doy u
que realmente
rabia mientras veía como él se guardaba las manos e
ti -habló él y pude sentir la tensión de su
amente no eres alguien en quien pueda confiar -g
busco lastimarte, es todo lo contrario a lo que realm
é pasar
drás aquí
ondió él como si nada y la mole
s manos
e la cabeza
que no va a p
a llamarme a
momento no lo entenderás así que
ro dormir, dé
emente él no
as cargándome en su hombro para comenzar a caminar
iones pero sin importar la fuerza que yo le ponía a estos golpes a
que la anterior y me colocó sobre la cama pero mi alarma se encendió en el momento qu
n que puso mis nervios de punta y por eso mismo empujé c
rme daño pero él se levantó de mi cuerpo poniendo sus
rte aquí, co
escap
e tu puedas ir y que
nte buscando asustarme y se levantó
i cuenta que la cerró con llave y acto se
erilla de la puert
arme de aquí aunque no sabía si en esta
asi estuve ronca
me a
que en esta ocasión no me reprimí ya que estaba sola
elo y abracé mis piernas con mis brazos enterrando mi ca
ué va a pasar conmi
por esto, aunque realmen
a que va a e
nto por mí desde su adolescencia, la cua
o llorando hasta que me quedo tot
ri
ta que yo lo ordene o va
die va a tocarla ¿Entendido? -gruñí a mis hombres quieres parecí
nsciente
do y dirijo mi mirada a Carmen
n, no puedes abrirle
iña, Adriano. Ni siquiera pued
tar allí encerrada ¿Q
sto iba a pasar y Carmen se pondría
rque esta
ente que nadie va a protegerla
onfiaría mi vida, es por eso qu
o que haya he
a dejarás huir o jam
pero yo sabía que ella no lo ha
o que má
prueb
sperando tu
án las llaves -le dije poniéndolas sobre la mesa, aunque yo me quedo
o terminó asintiendo con la cabeza antes d
ntas que
infantil impulso alzó mi cabeza para mirar a
iendo como mi corazón se
o voy a ganarme su corazón y ella va