TENTACIÓN PELIGROSA: UN CONTRATO CON EL CEO
o podía hacer nada, solo
ue al principio parecía muy dulc
cera con la pequeña en br
a saber como iba todo, cuando le cont
uró mucho, ella no paraba
n disfrutaba de
on mi cabello, no dejaba de tir
s y era tan idéntic
aminar, así que la
ella por la ciudad, n
cerca, en cuestión de minutos
-murmuro
as manitas, la helade
rte no podí
vamos a otro lugar, además e
deras, señaló nuevamente la helade
emos ir
dejado ni un solo dóla
empezó a llorar desconsoladament
on los ojitos azules, las personas
por favor, c
an rojos, su carita se estaba empe
e maneta ostentosa y no puede comprarle un h
lesté al escuchar los comentario
no era suficiente, mucho m
de comprar lo que esa pequeñ
l lugar, la pequeña se volvía loca mirando l
nte, me entregó los tres helado
o, los ricos definitivamente no tení
el helado con
dólar, la pequeña tomo la taz
en mis propios
mire mi vestido, la pequeña había de
staba derretido, ya que ell
xclamé presa
que podía pensar era en que el p
no,
alía cinco vec
una cantidad como esa, Catalina e
cupada, negué con la ca
ese imbécil, yo no
ste vestido, a fin de c
ezó a timbrar, tomé a la pequeñ
auto, me miro por unos segundos, l
stado horas de la noch
lo le di lo que ella me pidió, adem
uto, sus manitas tení
una compensación
terminado de pagar -
sto, baje la cabeza an
necesitaba un vestido nuevo para e
tan elegante para cuidar de una niña
, como podía decirme algo
a hora aproximadamente y ni siqu
e, además se nota que
o y yo pobre, para mí
aba en su auto, se marchó con total tra
diría a mi amiga, el vestido era bl
o era justo, porque carajos no me di
ando de mí, y del hecho de que no
suelos, Caty estaba sentada en el sofá, al
edió? -Pregu
u helado sobre mí,
s, mi amiga se levantó y se acer
fue tu culpa, fue un
tu trabajo por mi culpa, trate de pedi
rdo, me inventaré una
el vestido a la canas
e sentía realmente indignada. É
🌼🌼
ía cruzado la raya, quería golpe
nterior, ese hombre se habí
ga me miró por unos segund
uando pensaste que irías a cena
gracia -respo
on la cabeza, no parecía p
a, eso debió de ser muy gracioso,
ebes de cuidar a mi sobrina, que tiene un carácter como el
se, al menos ella no est
eñor Grayson, se est
esta, seguía
odio, es un co
de shock, como si hubiera dic
de ti, puedes estar a centímetros de su cuerpo, ese homb
a, lo sabía, ella
arenta en las revistas
e por dentro, mue
tro en mi traba
ngaño. Eso es lo
, no creía nada d
encantos? ¿No te atrae ni un poqui
, cariño, ese hombre
ie, estoy segura de que no
divertida, ella me mir
que te sientes atraída por tu jef
epetí nuevamente -¡Es mi
mintiendo, hasta tenía sueño
o puedes mirar a t
día con ella, siempre
ar a trabajar en ese lugar, no quería av
í misma, había compra
mpleto, pero unas cuanta
o es un pecado
n caso
el sofá, al fin un poco de tranqui
ería disfrutar de la p