Relatos de una Pasión
ita
spaño
s y aunque sentían lo ocurrido, se alegraban de que lo hubiésemos solucion
an bastante felices. Nos contaron que también en Dinamarca habían tenido alguna relación con otras personas, per
on a la Web y nos inscribieron. Hicimos nuestro perfil y vimos a las diferentes
tada después de una jornada de trabajo, la emoción de la visita y los últimos arreglos en la casa, así que sobre las doce cay
duchamos y salimos a que vieran la cuidad. Durante toda la mañana no salió el tema del sexo, todo iba de maravilla, pero en l
e la respuesta afirmativa, comenzó una conversac
manos recorriéndome discretamente de arriba abajo. Por fin entramos en casa y directamente al dormitorio, nos desnudaron, nos tumbaron en la cama y una vez desnuda
pene que debía medir unos 30 centímetros de largo por 5 de ancho en la cabeza, era enorme, y una vez dentro de mi chica, parecía que la llevaba al éxtasis continuo. Laura se
ocasiones, y así me tuvieron casi una hora. Ana y Laura por su parte, seguían con su fiesta, intercambiaban posiciones, consoladores, lenguas y todo lo que tuviesen a mano. Olga se unió a ellas aportando dos nuevos consoladores de tama
así hasta que estuve a punto de correrme, pero de nuevo paró, me la cogió entre las manos, se la llevó a la boca y se la metió prácticamente entera. Comenzó a moverse muy poquito, pero haciendo gran presión con los labios, me sujetaba para que no me saliese
viciosa, luego Ana por caprichosa, María por mamona y por último Olga. Repetí los coños en ese orden y se sortearon el final. Acabaría recibiendo mi corrida, a
manejado por María que es follada por el trasero con el consolador de cintura que maneja Ana. Las danesas se pusieron de acuerdo y di
ue me la follé a cuatro patas con mucho gusto, con la atenta mirada de tres mujeres que se masturbaban mi
l verlas desnudas en la cocina. Según bebía una taza de café tenía la sensación de
arnos la cuidad y los bar
e el amor con pasión porque después de un s
cr
☆
ita
ompañ
udiante, después de realizar todos los exámenes me quedaba
piso; una mala idea ya que a él le quedaba un examen por hacer el vier
no volvería hasta bien tarde, tal vez hasta después de comer, por eso el jueves por la noch
mi compañero se marchara al exam
este? -refirié
el último repaso en la universida
y a preparar la bañera pa
ría poco después, no se esperaba que en el desayuno iría cierto,
y particular, pero yo sabia que en poco instantes m
en mi habitación... solamente con una minúscula toalla alrededor de su cuerpo desnudo, con su melenita
emas con el termo del agua y
ción simu
mil demonios y mi novio no está. ¿Me quitas t
lla a ver que problema tenía, aun sabiendo lo que buscaba,
él, la pequeña toalla se subía y dejaba parcialmente al descubierto su espectacular y bien for
bombona de gas está abierto?
úpida soy! No me habí
a comprobar el paso de gas, sabiendo que la minúscula toalla de
ve
lgo de saliva y palme con firmeza su ansios
lentita por está parte. ¿Segur
ar volcada sobre la bombona, g
go más calentito
alpando al completo su conejo, aquello le encantaba y movía bien sus caderas para que no hubiese ningún rincón que no obtuviese pl
tos nos sabían a poquísimo, estábamos encaminados a terminar en
endían de los cubitos sobre su desnudo y acalorado cuerpo, fui de arriba abajo, dejando caer las gotas y chupando después la zona, primero por su boca, después por la b
quería, me mojé bien las manos y palpé bien su calenturiento conejo, le daba muchísima impresión el cambio de temperatura, pero le encantaba, empecé a rozar sus labios con el borde de los cubitos q
llo así que dejé la parte inferior de su cuerpo fuera de la mesa y sin pausa procedí a propinarle con mi trasero sacudidas que abarcaban hasta el fondo de su húmedo conejo; llegado el mome
nos rodeaba, un olor a sexo que segu
tinuarlo en la
no continuar lo que