Donde estás tú, estoy yo
ella fue lo suficientemente inteligente como para no hacer nada que lo provocara, y aun en caso de
chadas de sangre a los ojos de los demás, per
no servía para nada, que todo cuanto hacía era causarle problemas a Martin, por lo que nad
do en su amor por ella? Si se hubiera cansado de estar a su lado y la hu
de mi vida", aunque sus dulces palabras sonaron a
nte y de sangre fría, pero nadie sabía cómo había logra
dejar sola en nuestra noche de bodas? ¿Qué podría ser más importante que tu esposa en este momento?", y sin embargo, una mirada fría le atravesó los ojos a él al oír ese comentario. Tenía que irse esa noche, o los mayores
os, y cuando Martin le indicó que se fuera,
alón estaba inquieta
cabeza a su esposa y dijo
ella, ya que era la única forma que s
ado gravemente herido aquella vez, y pensando que
en quien erróneamente había depositado su confianza, también informó a Martin de esto, pues separar a aquellos dos
re dientes y dijo: "Está bien", haciendo que su esposa lo mirara estupe
ía que él pudiera reírse
dándose cuenta en ese instante de lo ciega que había estado anteriormente. ¿Cómo podía haber pasado por
ambio de ropa enseguida", dijo Cassandra pon
l sofá sin expresión en el rostro, se puso a dar suaves golpecitos al reposabrazos con eso
n cambiada y vestida con ropa negra informal, y cuand
esivo, así que, el hecho de que ella mirara a otros hombres era suficiente para p
"Está bien", y al ponerse pie, Cassandra alargó la mano enseguida para tomarlo del
jos, él respondió con voz fr