Cien años de amor, cien años sin ti.
ue el mundo y lo que hay en ella, le perten
acto con la piel era exquisito, me gustaba, la humanidad servía, se encargaba de h
ella estaba con una bata negra que le llegaba a los pies, cuando me vió sonrió maliciosamente, creyó que con el sexo me tendrí
buscarme para coger conmig
tú sabes cuánto te
e deseo demasiado. Dijo la mujer mientras dejaba caer la b
tu quita ganas, te dije claramente que éste lugar es
, le ordené de manera que
nían razón los otros al decirme que tú no toma
e den palo en vez de da
maldita mujer, cuando la tomo por los pelos,: _eres tonta o qué, ¿buscas tu muerte? La
ándome la espalda y miro su coño palpitando, ella quería penetración, se la iba a d
mecerse, empiezo a darle duro una y otra vez, mi acc
longitud gruesa y dura, me matas de placer, la
y otra vez, retiro mi miembro de su coño y
ía, cuando salgo del baño le pido que se largue,
es tan buena, no deberías desperd
ella me mira de reojo y dice, _¡Volvere cuando q
deño y dice, _Si no, me encargaré de poner tu reputa
mis atributos son mi responsabil
e, escogió mal a quien joder, antes que raye
la, solos se bus
itante de oro y plata que tengo en unas de mis propiedades, son
su necesidad de querer lo ajeno,
que se casara, gracias a él me volví en lo que s
e nuestros pies no tocan suelo, solo lo hacen para impulsarse más hacia el aire y hacia
es el año 1940
o asume como presidente de México,
sia, rumores de guerra entre los franceses y A
de alimentos, de la mantequilla, del azúcar, de
quezas y vuelvo hacia atrás, pareciera que los
scar mi
ión enfrentarlos, están