Adiós, mi amor imprudente
laba parecía bailar juguetonamente alrededor de Vere
de incomodidad y sus orejas se
reacción, se burló de e
con Blaine. ¿Por qué eres tan delicada?
sinuaba que ella fingía ser
n, decírselo le
malentendido, soltó impulsivamente algo q
eberías haberme ace
nte con Jeffrey, le dio unos
l se hubiera tensado en respuesta al simple toque de ella. Incl
rlas persistentes. "Señor Yates, ¿por qué
uave en la oreja y susurrando: "¿Quieres un camb
creando una atmósfera de cr
optaron por distanciarse, temerosos
no era un secreto que Blaine y Verena habían
llegar a un acuerdo con Blaine y en su lugar entablando un coqueteo
io de la multitud acomodada, mantenía a
elante, meciéndose con deliberada lentitud, esperando con paci
, solo los adinerados optar
e cuenta de algo y dio m
erba, Jeffrey y Verena estaban mo
mpartió un momento con Jeffrey, quien le devolvió
n límite a caballo, una sutil alarma lo invadió. Apretó las rien
frey y se dirigió a cambiarse, pe
de eso, Blaine irrum
te atreves a seducir a Jeffrey? ", acus
mbién en llamas. "¿Por qué no me atrevería? Si hasta una rata acorralada mu
histeria, resonando en la atmósfera carga
un estado de frustración, culpándolo sin rodeos de la situación en la
ugirió Blaine, percibiendo una conexión afectuosa entre Verena y
jó la precaución a un lado y la besó, ignor
con una respuesta feroz: sus labios se encontrar
s necesidades, ve a buscarla. ¡No m
el abrigo y abrió la puerta para marcharse. Blai
e inmediato. No vayas a reunirte co
ulina interrumpió su acalorado intercambio.
e confeccionado, de pie fuera de la puerta. Su mirada, fría e inflexible, recorrió la escena: los dos e