Un juego sin ataduras

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de su habitación a alguien que n

dia hora después de descubrir que s

s como si buscara algo ahí abajo. Ninguno de los dos pe

Se ajustó apresuradamente el seductor conjunto de lencería que llevaba.

intensidad. En ese momento, lo único que podía percibir era un par de ojos llenos de deseo que se clavaron e

a de baño, ejerció un poco de fuerza con el brazo, lo que hizo que Sharon quedara presionada contra el espejo de cuer

dedor. Después de un breve momento de desconcierto, Sharon cerró los oj

oculto en el interior de Andrew, revelando una faceta suya que cont

anunciando la llegada de Bennett justo antes de que este

ew se colocó estratégicamente para bloquearle la vista a Bennett. Al sentir la inminente arremetida de Bennett, Andrew giró la cab

la larga pierna de Andrew, la puerta se cerró de golpe, sellando cualquier otra visión de la escena interior. El s

e de la escena que acababa de presenciar, quizás por el

La voz de Andrew res

aves, en un marcado contraste con su fervor inicial. El recuerdo de Sharon de esa noche

bía comentado el notable físico de Andrew, sugiriendo que debía ser hábil en la cama. En ese momen

0 de la m

no y descubrió una cantidad asombrosa de llamadas perd

blemente eran de Bennett, quien debió descubrir que lo había bl

des grises. Al darse cuenta, se encontró sola en la cama, lo

indicaba que alguien se había tomado la molestia de ordenar. Además, el aire acondicionado

rew habían sido demasiado superficiales. El encuentro íntimo de la noche anterior había sido indudableme

brar el cumpleaños de Bennett, pero ahora consideraba que permanecer allí era un inútil desperdicio de

su jefe, mientras que darle vueltas al asunto a

mente en su vida. Mientras rebuscaba en su maleta, eligiendo la

ada, presumiendo de curvas seductoras en todos los lugares correctos. Su largo cabello caía en suaves ondas, acentuando maravillosamente su piel ters

rresistible, parecida a

que consumió la mente d

n instante, pero se recompuso rápid

resión previa que tenía de él como disciplinado, reservado y distante, la noche anterior

irla, esperando pacientemente a que

de deslizarse por sus muslos. Bañada por la suave y tenue luz amarilla, Sharon sintió un impulso creci

, su voz revelando un toque de

l hombre, claramente div

sual, Sharon decidió abandonar cualquier intento de charla trivial y abordó directamente el a

rse, mientras que Sharon se encontraba solo

pletamente

hacerlo de

n la habitación, haciendo que Shar

r la cabeza, preguntándose

drew la levantó sin esfuerzo, con un brazo sosteniendo su cintura, y Sharon ins

chó la voz de Andrew susurrándole al oíd