Amor extraño: mi esposa es mi enemiga jurada
zos. El pequeño tenía los ojos brillantes y unas cejas preciosas;
Rafael ten
rmal que un hombre de su edad ya tuviera descenden
ael al niño. Se había dado cuenta de que
Joel Patel, sacó una pequeña gorra con visera de
ó suavemente mientras le pellizcaba la mano gordita. Luego, le quitó l
ista del niño quedó bloqueada, pero sus ojos se posaron en la tienda de algodones
dijo Rafael con el ceño frun
o también testarudo. Además, era un comelón que se emocion
ello de Rafael con los brazos. Hizo un mohín y
uando vio la tienda de algodones de azúcar y pe
ardaespaldas que comprara un algodón de azúcar para Joel. Solo tenía un hijo, y
da, vio por casualida
n; sin embargo, para entonces esa figur
afetería del tercer piso. Miraba la pantalla de la computadora que t
ante un rato. Unos minutos después, u
l auricular inalámbrico. "
tero de sesenta pisos que tenía delante se sumió instantáneamente en la oscuridad. Desde donde estab
onces, recibió una alerta de depósito bancario. Se acababan de depos
udo evitar preguntarle al notar que ella
ompletar una tarea de ese tipo. Pero hoy le había costa
siento un poco mareada. Estaré bien después de una noche d
s?", volvió a p
había pedido que asistiera mañana. Curvó los labios y re
Hughes te complica las cosas, avísame de inmediato. Si surge una emergenc
orden de un superior a un subordinado, Car
e se preocupaba por ella. Si no fuera por
e había dado por la tarde. La observó varias veces y sonrió con desdén en si
unos cientos de millones de dólares en su totalidad. Además, su cortafuegos
lian y Sarah habían hablado hacía u
ias de haberla provocado. Ese sería su primer gr