La humilde exesposa se convirtió en una brillante millonaria
rendon, con los ojos entrecerrados y la voz afilada. "V
o sentía que el control, algo que siempre había dado por sentado, se le escurría de las manos. "¡E
. "Vaya, vaya. ¿Crees que esto tiene que ver contigo? No te hagas ilusiones. Te
reguntó él, con la mirada fija y penet
replicó Cristina con frialdad. "No
, volvió a estirar la mano hacia ella. Pero sus reflejos fuer
ujetándose la muñeca golpeada, con la fur
la mirada hacia la entrepierna de él y volviéndola a subir con una sonrisa burlona. "A
su rostro. "¡Tienes un
có ella encogiéndose de hombro
ue no quería verte estrellarte y arder. Pero si esto es lo que quie
ción resonando en cada paso. La transformación de Cristina no había pasado desapercibid
lvió la mirada con una expresión tan afilada que podría haber cortar el vidrio, y cualquier atisbo de audacia que tuvieran se disolv
terminaron destrozados; uno de ellos, literalmente, terminó con su virilidad destruida. Nadie
*
ada e insonorizada, alejada de la multitud, d
ayendo las miradas como un imán. Algo en ella le recordó un nombre que no había pronunciado en voz alta en años: Rosa. La mujer enmascarada que
lan, desviando la mirada del bar hacia su amigo. "Si B
innegable. No necesitaba hablar para hacer notar
su amigo y dijo: "No me digas que ha logrado atrave
ambiente. "Lo único que me importa es encontr
el ceño. "¿To
los rasgos.
ntó Ralphy, con un dejo de frustración colándose en su voz. "Pero
enía en la mano. "Exacto. Por eso seguiré buscando, cueste lo q
ortó el aire, rom
pio. Pero en cuestión de segundos, esa calma se desvaneció. Sus ojos se iluminaro
tó con voz firme: "¿Qué podr
volvió hacia él, sin aliento por la incredulid
ué estás hablando?". No se esperaba que el nombre de
ampeón de la competencia de tiro de la semana que viene obtendrá una oportunidad de tr
que él organizaba acababa de convertirse en el eve
nó hacia delante, bajando la voz, pero
una sesión de tratamiento de Rey. Y Dylan, llevas tres años seguidos en la cima de la compete