La Revolución de los Ojos Carmesí
tulo
s habría en nuestra sociedad -alzó la mirada hacia un punto cualquiera-. En el reglamento, aquellos mandamientos componen la postura y el com
iento que estaba en frente de la pizarra, dándole la espalda a esta- por favor escriban una
ue Civismo era una materia sencilla de entender, la profesora Aleisy lo ponía complejo, sus largas definiciones o exposiciones con análisis las hacían cansadas y poco interesan
os que componen la postura y el comportamiento de un individuo» y es incorrecto. Unos simples mandatos no nos controlan al margen como títeres y esa
adecuados a las situaciones
í está
reglas se vayan
edo ha
ue si
N
me crucé de brazos- y p
intentaba convencerme-, además, no cre
ad, no
muy loco. ¿Por qué creo eso? Pues, no es mi primera vez el tener que escuchar a una hija celosa de su nueva hermana; el hecho de que al principio me recibiera con una cortesía muy forza
cubrir lo que estos dos adultos traman al adoptar a dos chicas que perd
me vean la cara, así que la mejor manera es hacerse de la confianzuda con las personas y tomar el papel de la desentendida en cualquier conversación para que después de un cierto punto, pueda tener la certeza de que son personas con las que pueda tener una buena relación. Recuerden que no podemos dar nuestra amistad o cariño
poco de aire y sostuve la mano derecha en el frío pomo plateado,
Estaba con los brazos cruzados alzando u
as segura de esto? Digo, porque debemos bajar
trecerró
cuenta y nos descubrirán, lo que implica un plan fallido y tú... -
cciones como procesando y analizando las opci
los hombros en forma de derro
, un de
s tanto. Solo come un poco y trata d
hacer eso? -La miré estupefacta- Me est
enos ambas viviremos -quedé más incrédula y lo entendió-. No te preocupes, cua
ímite de las escaleras fuera la división de personalidades de esta chica, quedé más sorprendida. Yo soy capaz de cambiar para acoplarme a las actitudes o
día, caramba! Y ya debo ayudar a una casi desconocida, porque eso es lo que es ahora. Al parecer tener una familia no es
ueños momentos agradables nunca duran ¿Por qué a mí? pienso, mi mañana había comenzado con una
a a estos golpecitos que te llegan, nada es per
la voz de ella, esa
pienso mejor ella no tendría que montar todo este escenario e inventos solo por envidia. Quizás debo hacerle caso, y no acomodarme con ilusión a esta pareja, ayudarla a ver que
nsamientos- Casi no has comido mucho, ¿acaso, no te
de queso, un arroz blanco cocido perfectamente, todos bañados en una buena salsa roja condimentada que estaba para chuparse los dedos. Tenía que comer muy poco de eso, y eso poco luego
pidamente- Creo que las galletas, que por cierto eran d
la cuchara en la boca. Ya
s-. Uffff vaya que si eran deliciosas -fingí tener el estómago llen
io, como yo, por cierto-, eso sería considerado un ejemplo de la gula, que como sabe
rezar para terminar y comenzar a desayunar, almorzar y cenar. Rezar para, y por todo. Sus paredes estaban decorados por diversos cuadros con escenarios de algunas historias de la biblia; d
ando la palabra de Dios. Porque cuando eres huérfana y pasas de familia a familia, conoces diversas rel
peles. El estómago y la garganta me ardían; producto de los diversos intentos para devolver la comida hicieron que vomitara de una manera bárbara, tan así que, creo que ademá
e teníamos de distinto. Nunca tuve una hermana, y ella tampoco. Al fin y al cabo, tener el mismo cabello, la misma piel, los mismos ojos puede ser una coincidencia. La san
s como pirinola -miró a ot
solo puedo llegar como Pedro por su casa para tomar todo lo q
hacerlo. Junta
? ¿Y si nos
lo que tenemos exactamente -elevó los ojos calculando algo- 15 minutos ahora ante
á bi
e nuevo: incapaces
? -tragu
uestras manos en el pomo plate
con inseguridad- En parte yo te convencí, p
erminemos
manilla y
os al aire- ¡Dios! ¡Como Judas pudiste
bellino pasara por allí para arrasar con todo. Se sentía la suciedad en la habitación, como si n
onsable de e
sto que no
sos viejos, nos dábamos cuenta por las orillas amarillentas o esquinas rotas de las mismas. El polvo de los anticuados estantes estaba presente al
r, Dana? -Daia me
respirar -Estoy bien, gracias. Solo que el polvo y yo no somos unos bu
etas para revisar y
nútil -me quejé
s, D? -preguntó sa
y mortalidad en muchos lugares. No creo que tenga nada que ver con ese mensaje -cambié de hoj
erá nada sencill
uy conflictivas, es triste saber que el mundo viva así. La desigualdad en todos lo
ia? -me mir
ue sea, es una basura, Daiana. Me enferma el hecho de que haya personas que, teniendo lo suficiente, quieran más y más sin importarle si se lo quitan a alguien que en verdad lo
s mucha razón en lo que dices, pero no debes pone
mente-. Solo que es deprimente lo sucio que es la soc
s Danae -me son
nrisa y regresam
para la sociedad como tú dices, me estas ayudando
ste hoy a esta casa sabía que no podía a esperar para interactuar contigo de manera muy familiar o esas cosas, etcétera. El caso es que debías saberlo, porque te leí -le miré extrañada-, leí sobre lo que te pasó a ti y a tus padres. Lamento lo
y no me tomes el pelo, qu
vista con las personas, pero tú -miró directamente mis ojos-, sé que tú eres de mi co
en ese momento responderlas. Sus argumentos eran válidos, me quedo más tranquila porque al decirme esto, aquellas pequeñas desconfianzas que aún me surgían se h
reo -
os reímos casi a carcajadas, cuando nos dimos cuenta del
ato en ese lío de papeles
tiendo casi nada de lo que dice, pero esas imágenes
na de ellas eran como pruebas o evidencias que complementaban lo antes mencionado en las demás carpetas, problemas sociales, sus causas y sus supuestas soluc
ar a leer me di cuenta que era una especie de diario el cual el autor se mantenía en el anonimato, sin embargo, parece conocer a los Peskov y es muy cercano a ellos
aquí -fue lo úni
¿Q
é su brazo par
bien, el cru
e una
hogados escapa