El Pecado de Amarte
diera responder, una v
burla colo
l te v
k con su rostro mortalmente pálido. La sangre casi goteaba en
mejor que esperar una vida pacífi
parentesco, ella no esperaba
enmarcada po
gico de su vida, y ayer se pe
car: "Lo siento, Tabitha. Realmen
sus mejillas, no se encontró ni
brillantes se atenuaron gra
entamente se acercó al imponent
jor opción, no solo para ella, sino
ujer con una fría sonrisa en su ro
ella solo podía ser tan insigni
o, ella tenía
que él la me
día seguir en silencio
abrió la puerta del auto y ella entró. Desde el momento en q
a miró con una sonrisa frí
plir mi palabra". Su respuesta inquebrantable hizo
uen
alió inmediatamente. La brillante luz del sol la cubría desde arrib
de su ropa, el sencillo vestido en
echo de lana, por lo que
ntras el hombre tenía frío como una estatua cincelada en hielo, la mujer era tan humilde
s personas se volvi
trantes, Tabitha bajó la cabeza para
uso una delicada l
atrimonio, uno para ella y otro para Bo
jo fríamente: "No des por sentado que ere
s se sintieron como carámbanos apuñaland
milia y hacer que dejen de ins
uerta y echarla, pero ella se armó de valor para aga
al co
pitió co
una sonrisa malvada
al oído con voz fría. "Si me sir
un teléfono en su regazo y d
teléfono y lo tir
ió el labio mientras reprimía s
. Ella era su espos
s, no tenía derecho a in
a noche. Como es nuestra noche de bodas, recue
ajó del auto y ordenó al conductor que enviara a Tabitha a su casa, sus largas p
ntras la amenaza del hombre resonaba en sus oídos
gresó y ella permanec
isqueó su tostada. Era imposible que viniera por la mañana
s a la idea, tenía más
ductor la envió de regre
ropia casa hizo que Tabi
volver a pisar su casa, todavía te
on su llave y se quitó los zapatos en la en
patrones decoraba las paredes. Una cómoda cuna azul claro junto a una mesita de noche de made
blanco solo empeoró
el blanco puro, ya que era del color de la mu
comodó en la cama, su mano extendió distraídament
ompió el silencio en el air
rededor de su cabeza y un delantal envuelto alrededor de su cintura, esa mujer parecía la imagen de una
u, quien tomó el l