La Hija del Traidor
l tiempo transcurrió mucho
asado casi dos semanas y mis
aron de tratarme mal a partir de ese día. S
estaba bien, cómo estaban mis manos u
hablaran puesto que tampoco lo neces
u viaje a una manada cuyo
ionalmente para soportar miles de insult
ahora, porque mañana yo iba a cumplir dieciocho añ
ella f
verá su
erán su
r mi cabeza una tras otra, ll
sperar para
los lobos de los tr
enormes y her
t, el de Lucas era Aaron y el n
ual era inusual, dado que les sucedió un año antes que los demá
a manada más grande y fuerte del mundo, hicieron un ex
o gracias a su liderazgo justo y firme. Cuidaron de la manada en c
í misma en un susurro. Seguidamente solté una risa
abajando y algunos otros me
n despectivos hacia mí! ¿En
ignorándolos y comencé a trabajar
bros de la manada empe
onto vi cómo el Gamma, ese asqueroso pedazo de mie
sto y se sentó al la
n para mí. Nadie me faltó el respeto ni me insul
todas mis tareas, me
ara la habitación, al contrario, era muchísimo mejor que donde habitaba antes. Era solo que no quería que
me lo ordenó usando su voz Alfa y
oluntad, tuve que cambiarme a e
y ahora hacía mucho menos que antes. Esto me alegraba en cierta manera, ya que podr
que trataba sobre compañeros; la tía L
nto de soledad y paz, c
rte. Sin él, sin ella, o sin ellos estás incompl
ro. Herir a tu compañero o a tus compañero
una sonrisa se ext
nca podrá lastimarme, ya q
mada al
ísicamente m
sta manada
en estas cosas!", exclamé resoplando y ti
mi cuerpo con las mantas y
el día siguiente con la luz ma
puse de inmediato el
timo recuerdo
ión en loba, papá", dije sosteni
ándome en este momento tan importante. Quizás en
za me inundaba por dentro y una lágrim
errumpido de forma abrupta
es?", pregunt
a voz de Erik al ot
ondí secándom
on una expresión extraña en el ros
on educación. No obstante, algo en su
ra algo que decirme y
le pregunté para qu
ible y peligroso ataque a nuestra manada, así que debemos crear una alianza con ellos. Como son la manada m
por lo que pregunté: "¿Acaso no es suficiente
la comunidad mundial. Nos hemos enfrentado a muchísimos ataques a lo largo de los años, pero jamás tuvimos que pedirle ayuda a nadie
muy poderosos y violentos. Nos han llegado noticias de que ya han invadido otras manadas a la fuerza, con ataques fulmin
e aceptaban del todo, yo amaba genuinamente a mi manada.
ordaba: "Olivia, antes que
tender que comprendía la situac
ón, así que definitivamente podría unirme a la
rik se iría hoy mismo, y esto significaba que
es que no me queda otra opción que partir en busca de la alianza", s
a es lo más importante para todos", le tranquilicé con una s
e un abrazo de despedida". Él abri
orrí hacia él, con el cor
ivia", Erik besó mi
o", susurré y él me dio
soltó una agradable carcajada al ver mis accio
salvo, ¿de acuerdo?". Asentí con seg
n", le pedí abrazá
más complicaciones ni noti
ianoche; finalmente, e
e que llevaba puesto, lo guardé
ja con melancolía unos segundos antes
, el cual me llegaba hasta la cintura
ompleto de nieve; un clima helado me
amento, la luna brillaba
, asombrada p
la densidad de troncos, ramas y arbu
, miré mi reloj y me di cuenta
e hasta quedar por completo desnuda; el viento
el suelo, noté que ya
gelado y todas las criaturas en su interior se hubieran detenido. Lo único
elado penetraba en mis pulmones, y un dolor in
zaron a romperse
e escapó desde mi gargant
a dolorosa, pero jamás imaginé que pod
r sin control y caí de rodillas
columna, que se quebraba y
desgarrando mis
staba ardiendo: era un calor de f
me nublaron la vista unos segundos
co como la nieve sobre la que estaba
e pelaje blanc
e ese dolor extremo sonreí p
ro dolor me golpeó, esta vez
rietándose durante unos
lían la boca
n unas fauces y hasta pude sent
y cuando grité de nuevo, esta vez lo que inu
mé! ¡Finalme
espejo roto que había sido abando
ua
más que la seda de mayor pureza. Mis ojos eran rojos como dos pozos de sangre, y
te, hermosa y, lo más impo
o de basura como yo", expuse con tristeza y una
ura", refutó mi
e había hablado! Sin duda
e", murmu
. Mi nombre es Eleanor", declaró ella, sonriend
iz de conocerte por fin
er un poco?", pre
ndió sin perder tiemp
go realmente increíble de presenciar. ¡Nunca, ni en mi
dades eran
, como siempre lo había padecido. Toda la confianza en mí misma de
r una experiencia de años. Era extremadamente inteligente y, lo más importante, el aura que emanaba
er a tu compañero?", le pregun
ecta de las muchas virtudes que podía valorar: era linda, diver
a de tener una lob
ncontrado, Olivia", respondió con hon
todos me desprecian y no tengo un estatus al
. Con un tono de autoridad, me refutó: "¡No digas esas cosas nunca más! Eres fuerte y h
trabajo interno que debía desarrollar yo misma, pero con su ayuda, resultaría muc
on todo mi corazón y ella pudo ve
la amplitud del bosque y luego decid
algo que aprendería a soportar con el tiempo. Acto seguido recogí l
me sentía muy fuerte, como
os lobos solían sentirse debilitados; no obstante, ese no era
cuando, de forma desprevenida, tres aromas