Mi Alfa
sa
muchísimo, quizás mi mamá lo había espantado, o quizás finalmente decidió que era demasiado inmadura para él
olo aulla" recordaba sus palabras mientras m
eño aullido "es una locura" pensé enseguida "cómo si en re
a lógica decía que debería querer salir corriendo lo más lejos posible de él, pero por alguna razón, su presencia me hacía se
eír), entonces me acerqué y lo acaricié, entonces lo supe, no me pregunten cómo, pero sabía q
lo sea? – Me resp
ebe
o... pero de t
nunca me lastimarías,
ueña Ro... - dijo él y refregó su hocico contr
que funcionaria, pero era la únic
haré aunque este al otr
Es por tus oí
algo de lobos, es un po
alo – l
s adelante
ué no conf
mostrado mi forma de
n, lo dejaré así solo si prometes q
a Ro... aunque no sé si tus invitad
s que estar conmigo en mi fiesta, seré mayor de edad y ya
que eso no es solo un
me importa lo que tu opines
no me lo perd
endió las luces y g
ás bien?, escu
rre a Diego, luego subiendo la voz agr
llena... en noches así no podemo
o algo, no querrás
para ocultarlo, a no ser que saltara la mampara y se fuera. Entonces antes de que
lobo? ¡Entra antes d
erlo, pero ella tomo una pala
ila!, ¡aléjate de
¡ya
consuelo de que lo vería al otro día... después de volver a la casa me acosté en mi cama, solo entonces fui conscient
eg
ico ya que mi mente seguía siendo humana, no era como en esas películas de terror en que el ho
todo se sentía con más intensidad, el aire, la tierra, los sonidos, los sabores, los colores, podía ver mucho más lejos que de costumbre, ad
uila reacción, era casi como si no le sorprendiera que fuera un lobo... bueno... si lo ponía en respectiva, creo que lo sospecho desde el inicio. Lamentablemente no pude estar mucho co
o rechace a su protector, pero sí era común que se asustasen, entraran en negación o q
ba alrededor del campamento me puse a pensar en ello, ¿Q
l hacía joyería de plata, seguro tenía algo lindo para ell
va tod
tranquila para mi gusto
a un cumpleaños, una amiga cumple 18 – le cont
lo a
es que necesito un reg
rvir – dijo, abrió un cajón y sacó una pieza envuelta en un pañuelo de terciopelo. Era un bra
fecto! –
conejos en la mañana,
no, él la estrechó de inmediato y lue
o me acosté a dormir, mañana
sa
os, pero ellos en realidad no me importaban, lo que en realidad me tenía tan emocionada es que Diego estaría ahí eso, de algún modo, lo hacía "oficial"... estábamos recién empezando y no había habl
concluí, finalmente, "el me quiere y yo lo quiero, eso es todo lo que
queques con manjar – dijo con una sonrisa poniendo e
ias – dije sentándome – ah, casi lo olvido, invité
ja, tus amigos siemp
ego... es un poco ma
del co
n
na amiga o cómo lo conociste
mportante para mi ¿si? Así
do una mano en su pecho y echándos
o – insistí mirá
tiene este tal diego
lo v
hablando de eso... - dijo, abrió un cajón y sacó un regalo –
ar de llamarme rosita? Técnicam
rás mi bebe – contestó y me
dado, era una pequeña caja que en su interio
, gracias mami –
fiesta, así que me arreglé y fui a la única tienda de ropa que había en el pue
s cuales combinaban a la perfección con mis converse negras. ¡Era perfecto! En serio esperaba impresionar
comprado todo el día anterior, así que era llegar y armar. A las 8 estaba todo listo, los invitados estaban citados a las 10, así que tenía dos horas para arreglarme, me bañé, me puse crem
lo estaba pendiente del timbre esperando a mi guapo ho
eg
é usan los humanos para una fiesta?, tenía que intentar mezclarme para no llamar la atención... después de mucho pensarlo me puse un jeans u una chaqueta delgada de piel (era casi del grosor de un chaleco pero sin cierre ni botones por lo que quedaba ligeramente abierto), me acomodé el cabello con la mano y corrí hasta su casa. Llegué a l
pequeña Ro – dij
asmada, se colgó de mi cu
ños – respondí cerrando un ojo, luego entramos y saqué el bra
.. ¡es
entar a tu amigo? –
.. él es Diego, mi pololo – dijo con ne
sido imperceptible para un humano desde mi posición... lamentablemente con mi
la cocina ¿si? – dijo
midez en un sofá cerca de una ventana mientras es
ombre aquí? – di
la mañana y, como dije
omo 10 años
más, ¿Qué importa? ¡Yo lo quier
o que quieres,
voy! – exclamó y corrió hasta dónde estaba yo, me tomó la ma
y una vez afuera
n 2 minutos estaba en mi lugar favorito, un prado de flores a las faldas del cerro tras el cu
to es mu
a gustarte, es m
conversábamos, nos besabamos y acariciabamos, a
hora de lle
ontigo, por favor... -
va a preocupar – ella sacó su celular
se quedó dormida en mi pecho, la tapé con mi chaqueta para que no le diera fr