The Great Demon King I - Libro Primero: El Bosque Oscuro
a sig
. El gordito Jack se apresuró a entrar y comenzó a sacudirlo ansiosamente para
a su Pequeño Esqueleto para que golpease a Lisa, pero lo habían despertado antes de que pudiera ver el fina
licaba: - No estoy seguro de qué hizo Lisa, pero parece que convocó a un extraño esqueleto que no obedece sus órdenes. N
ás. ¡Oh, Bryan! Te juro que nunca he visto un pequeño esqueleto correr tan rápido en todos mis años trabajando p
podía estar sucediendo y volvió la cabeza bruscamente para mirar el cubo de madera. En algún momento el agua de múltiples colores se ha
nte hacia el esqueleto para que le diese a Lisa una lección, pero ¿no eran necesarios unos 36 días más para que el refinamiento de un tesoro demoníaco se completara? ¿Qué estaba pasa
e él o si sus amos se daban cuenta de que no estaba dirigiéndose a cumplir con sus tareas matutinas. Sólo tenía en mente llegar
ban a sus criaturas invocadas. A ellos no les importaría el destino de estos seres mientras que cumpliesen con su misión, pero para Bryan era diferente. El Pequeño Esqueleto había recogido diaria
os hacia la Facultad de Magia de Luz. Todos parecían tener expresiones
s de hueso en la espalda. Nunca he visto una cosa. Me pregunto ¿cómo f
á que Lisa puede convocar diferentes tipos de guerreros esqueleto porque su Fuerza Mental es más grande que la nuestra? - Athena también
ente mientras bufaba: - Yo estoy al mismo nivel que ella y nunca he convocado un esqueleto tan extrañ
...
corrían. Por lo que los estudiantes decían, era ev
día sentir el nexo entre él y la criatura, pero el esqueleto no parecía escuchar las órdenes que le estaba dando. Tal vez el refina
duados todos los años. Tradicionalmente los estudiantes más importantes de la Magia de Luz tenían una relación de competitividad con los estudiantes de la Magia Oscura, quizá porque eran las únicas magias que se oponían directamente de forma
ivido y haber pasado un tiempo escuchando las conversaciones o las actitudes de los estudiantes, Bryan había aprendido un poco acerca de estas cuestiones en su afán por enterarse de todo aquello que los estudiantes de necromanc
arrastraba a Jack consigo. Iba tan rápido que comenzó a aventajar a
e quedaron boquiabiertos por la sorpresa, mientras pensaban: "¿Cuándo
el trasero firmemente en el suelo mientras jadeaba pesadamente, sin dejar de quejarse: - ¡No más!... ¡No daré
toda su atención estaba puesta en la criatura que corr
ro como la tinta y empuñaba un puñal de hueso que brillaba débilment
parte de él. Los dos huesos de sus piernas se extendían como resortes cuando se movía y las siete púas de hueso aleteaban enérgicamente al mismo tiempo, facilitando su movimiento. Aunque no era suficiente para ayudarlo a volar, a
os conjuros de algunos estudiantes. Todo el lugar estaba repleto de magos curiosos que presenciaban el espectáculo. El Pequeño Esqu
egresara al almacén. Por desgracia, parecía que incluso a esa distancia el Pequeño Esqueleto era incapaz de recibir sus órdenes y este
ando el más puro y
a soltar esta inmunda criatura en medio de la Facultad de la Luz? ¿Acaso te duele tanto el recuerdo de
la más mínima briza. Un par de hermosos flequillos descansaban sobre su frente y sus ojos azules eran parecidos a dos joyas brillantes. Vestía los pulcros ropajes blanc
nte con Lisa. Irene la igualaba en casi todos los aspectos estéticos con una clara e
e tengo miedo solo porque eres de la familia Kámplin. - Lisa hiz
eres capaz de enviar a esa cosa lejos de aquí, me ocuparé yo misma de eso. - Irene alzó las manos con una noble expresión y lentament
espada salió volando rápidamente hacia el esqueleto. Este había estado jugando al escondite, pero se detuvo en silencio cuando Lisa dej
pequeño cuerpo del esqueleto se balanceó un poco por el golpe al mismo tiempo que un poco de humo negro emanaba de su pe
a no murió inmediatamente cuand
enemigo natural de las criaturas oscuras. ¡Su cuerpo debería haberse conv
a volver a las criaturas oscuras inmunes a nuestra magia? ¿Pero cómo pudieron hacerlo? ¡S
..
s mostraban expresiones atemorizadas. Todos miraban con incredulidad al Pe
udrirse al hacer contacto, pero un ser tan elemental como un guerrero esquelético debió ser desintegrado casi al instante. Pero este Pequeño Esqueleto que Bryan había refinado co
o de las bocas de los aprendices mágicos. Incluso Lisa se quedó al
emente la daga de hueso afilada con sus dedos huesudos y las siete púas de hueso aletearon furiosamente para volver a darle esa velocidad superior a la que
que sabía que con la velocidad del Pequeño Esqueleto no tendría tiempo de recit
ta el pecho, revelando su suave y hermosa piel. Incluso había un pedazo pequeño de ropa interior blanca como la
ensartarte en primer lugar. ¡Ja! ¡Ahora es justo que le cor
o Esqueleto si lo había escuchado. Rápidamente alzó de nuevo su daga y saltó hacia una avergonzada Irene que trataba de o
escuchas mis órdenes! ¡Pe