Entre la ruina y la pasión
e qué le pasó a Napole
ueño pero ordenado salón de clases. del Hogar Mac
uri
te satisfacción del joven al anu
ería saber qué sucedi
toomn ellnotroa.ndo y sollozando...
alió bien
ra francesa... ¡y murió!
e apuntaba al techo. "¿Charles?" Charle
que se puso verde y se cayó
estoy seguro de ser muy
a habitación, porque sabían que tendrían que estudiar
lice apareció en la puerta del salón
libro que sos
erró y luego la volvió a abrir. "¿Ha
. Mara miró el reloj en la
u corazón volvió al ritmo normal. El aire pareció desaparecer de la habitación mientras miraba el mar de rostros que la rodeó y se dio cuenta de q
e la nada, ahora institutr
una meta. La Sra. MacIntyre t
a. Mara no tenía nada.
a encontrar a Alice. Para luego enfrentar al hombre que regresaba a su casa, sin dudan con u
yo
la garganta y
uiero saber qué le
rta con un clic. Alicia parecía saber mejor que
hecho. capaz de mantener una conversación con el corazón palpitante y los pensamie
ue nunca huiría de su pasado y q
erta, y a Mara se le ocurrió que ese espacio de dos pulgadas entre la puerta y
o de que, en ese momento,
ara, deseando que su corazón dejara de latir con fuerza en su pecho, y envió a Alice lej
ntar al hombre que está a
uerta con firmeza.
ano se
en tu cabeza cuando te
n él en el centro de la habitación con dos pasos Aco
bol
timos doce años. Nunca en esa casa, y nunca
nunca le diríamos a ese
ajo de sus narices."
e que use". Tie
rande como uno, y frío. Será que siempre fue así? Mara
ado frío. Libertino, lujurioso y sinvergüenza Por supu
rizos ya despeinados, que
de vida. como un niño, sediento de adrenalina y lleno de planes. Y luego se esc
nte años, hasta que ella reapareció. oculto a la vista. S
a que ella dejó para que él viviera. Del hombre con el que lo dejó. Y luego se p
ente inmaculadas botas negras, y reconoció que Kit, al
spiro. "
as así", espetó. "Y
todo lo que
a este hombre. ¿Sabes cómo lo
ama así por
anado el apodo desde entonces. Yo
iado
epentinamente irritada. "No
das sus cartas en la mano. Y he hech
ió Kit con una mueca. Es claro que si. Eran lo
valía la pena pelear con Kit.
ró los ojos
Le pago buen dinero a la
de mi? ¿O
e Asesino y
e su hermano la estaba espiand
o que sí. Si
a más demonios que él en el transcurso del año. de a
e porque Nosotros necesitamos. Tú..." Ella vaciló, no muy segura de có
r el pelo una vez más, con un mo
o lo sé? ¡Po
pó por dónde eran-y por el nombre que usó. Mara miró hacia
e lo sé! Perdí to
todo y se lo confió estúpidamente. en su cuidado. Pero
hombres dejaron con sus hijos. El hermano le dijo que el b
o de la muerte de su esposo, y siendo entonces su hermano
unque desearía tener dieciséis otra vez, de poder conso
criticar tus errores. "No sabes lo que e
ido y nunca satisfecho. Él siempre quería más. Siempre quise lo mejor. el queria
onsiguió ningun
r sonrió c
sto desde su lugar en el infiern
a en negación. "Él ya
o la miró
No te habrías escapado. Yo no hubiera jugado. Yo no hubiera
niños abandonados y putas..." Él detenido
ño de nues
ticente. A Christ
ió. Ella sintió la irritaci
ue acepté?" "
uera así
mostraría. Y devolv
s palabras, y por un mom
hombres desesperados se convertían en m
ombres. Y los odiaba. "El
fue mínima
nar durante un año. Quizás más." "Tengo mucho de
ros ta
todo!". Suspiró, claramente harto de su
diera perderlo todo. La vid
dio un propósito en la vida. el no importa
e se le daba bien.
hermoso rostro
ra qué eso servido? ¿Para qué estás? Frunció los labios con irrit
os ojos haci
Él no peleará contigo, Kit. Ah
na silla que estorbaba
ara estaba petrificada. Ese la ira era familiar. En todos los
rte superior, ocultando que sus m
ción. Tal vez ella se lo mere
s manos. ella lo había hecho cambió tu futuro. Cambió
Kit viv
ntener el honor es si estoy de acuerdo admitir lo que hi
cabeza. " Me escapé. yo soy el que necesita perd
hay
á interesa
rvó la fresca tarde de noviembre. estuvo
nteresado. Él no sabe
aba en sus rizos que se volvieron dorado, y Mara record
guete detrás de él. Tropezó con la raíz de un árbol y se cayó, dejando caer finalmente el
por sus errores y luego se fueron enviado a la cama sin ce
a Mara porque tuvo el descaro
No era la primera vez que Kit t
padre. Tampoco fue el último. Pero hoy ella no estaba proteg
ba en él lo suficiente como
de él. "¿Y si
on un movimiento rápido, indicando qu
nes ele
nstante, la luz la confundió. por
e Asesino? Él y ese casin
mente aceptarlo
n no debería tenerla sorprendido, pero sorprend
ro no lo
s viejo y más sabio de lo que nunc
adre dejó grabada e
. Y ahora, tú tampoc
a sus pies, Mara trató de concentrarse en el trab
ngir que no me di c
sa, abriendo mucho los ojos
es", dijo Lydia, sentánd
ra llamar la atención de Lavanda. La cerda levantó la cabeza, estud
chó el camb
a docena de niños demoníacos". "Mejor que huir de u
im
a se rió. Lydia volv
codo con codo, y ni una sola
ocoqsuteóteenesuto
rubia y agitó una mano
re que la visitó esta tarde,
a mañana, no puedo evitar pregun
fue el eufem
amborileando con un ritmo perfecto
a mano sobre
n orfanato, Margaret,
enorme que apareció aquí al amanecer del día era el duqu
duque de
empezando a o
que Mara pudiera detenerse: antes de darse cuenta de
una línea delgada mientras Lydia
o e
as siguientes palabras que di
empo a que Mara sigui
contenidos por las dos docenas
oncella principal y la más cerca del amigo que tení
ejar a un niño"
la aristocracia aparecieran t
N
a as
o a buscar
bolígrafo en el
a y exorbitante donación al orfanato". "
lo de que haga uno?" Lydia i
estoy cerca, desafortunadamente". "Oh. Así que no
N
su segundo visitante del día". Mara
ente
e el Sr. Christopher Lowe. Muy rico, según tengo ente
. Mara apretó aú
ado. "Escuché que perdió todo por culp
o mat
tuvo. Lidi
pelusa de la falda. "Parec
o." Lidi
ue conoce al d
que la sacaría de su escondite y la revelaría al mundo. M
co afortunado poder empeza
a confiado en ella durante siet
l que jamás había hecho. Mara resp
entamente. "¿Desde que ma
de decir. Lydia lo sabía mejor sobre Mara que cualqui
laves joven e inexperta para cuidar a un grupo de niños de un gran propiedad en Yo
ve. de aceptación. Cargado de amist
i nombre", s
inaron con Mara. Las lágrimas brotaron de sus ojos y Lydia sonrió, inclinánd
cerda, que roncaba dormida. "Una granja en S
a so
en una almohada suave y gana comida de mesa No le
"¿De dónde, entonces, ya
siete años, esperando. todos los días, que estas preguntas nunca lle
íst
ien que creció en los muell
la que había vivido cuando era
podía comprar Gran Bret
o al resto del mundo. La c
Le gustaban especialmente los retratos y llenaba cada centímetro de las paredes con rostr
excesiva, en el mejor de los casos. hipótesis Una afre
í en los
Lidia lo sa
uidadosamente sus siguientes p
ue debería usar para describir sus interacciones con el duque. La cita era tarde en la noche y
spera de
tras se balanceaba al borde del precipicio que admitía la verdad por el primera vez en d
S
ó. "Él no te
a es
jeaba distraídamente el antebrazo. "¡No
banas para que pareciera que
ntes de que alguien viera lo que estaba haciendo. Suc
debería decir. Ella cumplió varias el sobre en
a su vez en
u nombre", dijo final
itió, probando el
ón, complacida al escucha
sona. Placer y sin miedo.
gre y franca. "Es realmente u
ras que la inundaron de alivio. "Cuando
o, sabiendo lo que eso
orfanato lo perdería todo si la vinculab
drá lo qu
también la tenía planes La vida que había construido podría termina
obtenga lo que
suras de los labios de Lydia se le
de todo. Si quieres irte. "No quie
son
itará después de que me haya id
marcara la importancia de ese mom
xtendiendo los sobres que sosteniéndoselo a Mara, "tal
sin
ieron cuando tomó el so
ente, en un garabato casi ile
o, estampado con un delicado ángel. femenina, esbelta y en
onoc
ro para examinarlo. "El sello
corazón de repente dio un v
de Lydia se ilum
cena todas las noches. Lydia bajó la voz. "Escuché que los miembros solo necesitan pedir lo qu
los ojos
adquirir, ¿cómo
res muy poderosos", se e
en la forma en que la había mirado. le hizo entrar en su cas
zando su dedo debajo de la cera platead
bateadas en la nota, dos
pensado en usar papel pergamino. tan extravagantemente.
emple, excepto, quizás,
eve en
. Habían pasado doce años desde que alguien él ha
dia estaba inclinada sobre el escritorio,
no me molesta". "¿Ti
Ese fue su castigo. tu peni
pel a un lado y dejó que su mirad
s interesante
lo supo sin tener q
y diecisé
el invierno sería muy frío. La ira, la frustración y el pánico brotaron, pero Mara tragó s
ndo la pluma con cuidado en
as este
obre, con el corazón en la
evitarían que los chicos Casa MacIntyre climatizada durante un año. Ell
tiremos el pr
upuesto, escabullirse por la puerta trasera de uno de los Los sombrereros más legendarios de Bond Street, en medi
itar el contacto con él, que estaba grande como un toro. No e
que ella pasara, como si era bailarín y no boxeador. como si la gracia hubiera sido tuya, transmitido en el vientre de la madre. Mara, sin emb
entrar en la habitación, cuyas seis lámparas hacían poco más que pr
nos está esperando. "¿Sabe ella p
ruzando la tienda, moviéndose en
vestir a una mujer y que me gus
lo si
esto a
Temple miró por encima del hombro. "Tengo pocas
ctivo Temple, lleno de
con esos hombros anchos
las mujeres se pisoteaban entre sí para h
o qu
slizó a través de una pesada cortina. que d
era diferente a la de ella. templo era hijo y heredero de
gastó su dinero en las somb
de los demá
culpa que sintió al pensarlo
li
is fondos?" "Cuando
e voy a saber que c
Mara tuvo la sensación de que no deb
fiar en mí". Ella hiz
stócrata en quien se p
ados, maltratados, lujuriosos y