El Secreto Entre Los Dos
ese
M
sigui
exclusivo que tengo aquí, es capaz de sustituir su presencia ni tan solo por un minuto. Esta inmensa casa debió ser nuestro hogar y no nuestro escondite. La cama donde ahora me encuentro sola, debió ser cómplice de noches y amaneceres sin f
llamada de mi celular indicando que recibí un mensaje. Rápidamente
ides que eres lo más important
mientras que en mi rostro se dibuja
mía, cuídat
idamente continuo con
.
ra poder ser, aunque sea un poquito libre, cuando me doy cuent
rano? - me pregunto a mí misma y avanzo con
que yo hago lo mismo -¿se puede saber dónde estabas? - me pr
gún problema? - cue
zo -el problema es que soy tu prometido y tenemos un almuerzo de negocios con unos emp
io de ropa y ya nos vamos. - digo e intento seguir cami
onde fuiste?
niego -no tengo p
que soy tu prometido y que en
día desde que prácticamente me compra
que nos conocimos, tú me hubieras aceptado, pero no... decidiste hacerte la difícil, pero mira, quier
- sentencio rápidamente me meto en mi habitac
o mi vida completamente.» pienso mientras apoyo mi espalda contra la pu
za
cios que mi padre hace con su socio y quien por obligación será mi suegro. -Izan, ven
istrar el dinero, mi hermano es quien es la mano der
que esta aburrida en la casa. Llévala a almorzar o de compras, u
atenta mirada de mi padre y de Lore
en que la conocí en aquella cena entre nuestras familias y ella se obsesiono conmigo... mal
bién existe en mi realidad. Cuanto quisiera tomar a Mia de la mano y huir con ella lejos a un sitio donde seamos solo ella y yo, pero las cosas no son tan fáciles, si yo rompo con Giovanna, m
repito intentando consolarme con la idea de