Soy tuya
e tenido que traerla a dormir con
miera tranquilo porque estaba un poco descontrolado, y le
frentecita intentando despertarla
brazos sobre la cama y me d
sita apesadumbrada d
asi no me da tiempo
as para vomitar y cor
emonios e
desmadejada y agotada sobre mí, recuperándose del esfuerzo
O, SAMA
iña muy nerviosa también y abraz
ha pasado? -preg
estra habitación y llora desconsol
y va guiándonos sin decirme nada hasta el fondo del baño, directo a la habitación de p
nena,
no me detengo a preguntar nada porque es evidentenque algo sufici
or...
a vuelve a llorar sin consuelo. Doy saltitos con ella, intentando calm
Tenemos que llevarla al hospit
queja él dand
rviosa. Salgo a la terraza mientras ellos hablan de algo que no consigo oír y veo
e puede dec
espondan. Mi hija necesita que l
e mí mientras preparo
explica lo sucedido mientras tomo cosas q
afirma haber visto a una mujer. Lo mejor es que salgan de a
perder de vista a mi niña. La lavo como puedo y la visto. Aaron hace ot
que ha pasado porque estoy muy
, Aaron
i hombro. Su padre le besa la frente y toma el bolso con las cosas de ambas, las ll
nta de que lo tiene mi marido. Ni
to y cuando llegamos, Aaron sube al asien
uando acaben la pesquisa manda a electrificar todas las vallas de la propiedad. Aumenta la seguridad
onnor es de un profe
n todo el tiempo que lleva trabajando con no
Un tipo jóven con trastornos mentales controlados luego de volver de Afganistán, pero solo de verlo : fuerte,
as el asentimiento del rubio exmarine y no digo nada. Si quiere perder la cordura y poner
ntos que a veces olvido hasta sus nombres. Creo que la mitad de la fortuna de mi marid
esto? -pregunto rompiendo el silenci
do con su contestación -te ha llegado u
as él aparca, la niña vuelve a vomitar sobre mí
mis gritos se hacen sobrehumanos y los médicos aparecen, incluso sacando
. El miedo me vence y los brazos de mi marido son lo
renta minutos hasta qu
se ha mantenido a nuestro lado sin dejar de observarme desde la
es fuerte. Es una niña mu
yo no dejo de pensar en el estado en
de se fue, y entonces el médico sale, con un
arme cuenta y recordar perfectamen
fectamente el efecto que está causando sobre mí, fue una de las presas que m
ce estar pretendi
tiene que preocuparse, e
las que habla, son de la mujer que manoseó mi cuer
y la veo acercarse a mí, mientra
te preocupes. Sus ojos me recuerdan a
ada. Asustada
uedo decirle a Aaron, pues ya en su momento él hizo algo ex
ias manos si la lastima
rdad, y me enseña su tablilla medica p
RANQUILA QUE NO SABRÁS
abajo que hacer...estás
a alg
ca, que hay secretos que tendré que revelar y