El Último Adiós
me encargo de lo demás", ordenó Gracie con frialdad luego
e dio la vuelta y fue a la cocin
acercaran extraños, de modo que no había
a unos días atrás, pues llamar a una ambulancia a esas horas de la noche ale
las manos y los pies de su e
amas la devolvió a sus sentidos, por lo que enseguid
l baño escuchó un repentino golpe en el dormito
habitación principal sin soltar el cuenco cuando de repente
ien se escuchaba débil, la dura e
explicación cuando una voz aún más enoja
ué haces aquí. ¡Di algo
xpresión furiosa de su esposo parpadeaba e
la doctora, quien a pesar de sonar muy estable, la sensaci
mi esposa, ¡la señora Lu! ¡De hecho tengo que agrade
s ojos enrojecidos, él le dio
pocas lágrimas se asomaron hacia sus me
a pena por ella, e inconsci
ijo que ustedes dos procedían de familias de igual rango soc
rar, la puerta se abrió, por lo que ella se soltó a
, sudó frío y los nudillos se le pusieron blanco
pánico la embargaba. Ella siempre creyó que la familia Lu quería que le die
a sido la otr
habría podido quere
la presión de actuar como la esposa de Rayan, se burl
ica, como protegiéndola de su mir
ente con la bandeja en la mano, tra
eso ya pasó. Yo no los obligué a romper. Señorita Mo, no es
s que los ojos penetrantes de su esposo le daban a entender que si l
él de forma despiadada, con severidad, y sin
o para pelear con ninguna mujer por un hombre que
casados y yo soy tu esposa. Si quieres protegerla a ella, habla del problema con tu madre, quien a fin de cuentas fue la primera en e
hacia Gracie, el color desapareció del rostro de esta, quien la miró con ojos
nessa esquivara el tazón que se volcó encima
te se quedó sin aire porque su esposo la empujó co
pasa, no te
o con esas palabras llenas de od
vocó. "Mi vida es mucho más valiosa que la de ell
a mano alrededor de su cuello, haciéndola jadear desesperada por aire. Ella p
salvaje, más grande se volvía la
e sugirió entonces con una voz exageradamente
o la había llenado
e deslizó por la pared mirando hacia arriba, donde se
nte y silenciosa, e incluso su feroz t
llamar a Gordon Shen, y mientras esperaba que atendiera,
preguntó la voz suave al otro lado de la línea. Si bien
ital con Gracie? ¿Sabías sobre l
algo andaba mal, así que guardó silencio durante unos segundos y luego cambió sut
de una opresión en el cuero cabelludo, mareo