El Esposo de mi Jefa

El Esposo de mi Jefa

Viviana_t

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Capítulo

Sentirse atraída por un hombre casado quizás puede llegar a ser bastante emocionante en la vida de una mujer, pero también un gran problema cuando el tema del amor se involucra. Después de un grave incidente en el trabajo Ciana Bolton fue despedida injustamente quedándose desempleada, su mejor amiga la invito a salir para que se olvidara de sus problemas y fue justo en esa salida cuando se topa con el socio de su ex jefe. Phil Harper se encuentra a Ciana en un bar a quien ya había visto en la oficina de su socio y por la cual había quedado completamente cautivado, esa noche, decide invitarle un trago, pero luego de tanta charla un beso surge entre ellos que los deja completamente helados. No estaban seguro de que fuesen los tragos o el hecho de que realmente se deseaban, sin embargo, ambos se vieron envueltos esa misma noche bajo las sábanas pertenecientes a la cama de este atractivo CEO. Pero el cuento de hadas termino antes de lo previsto cuando Ciana se marcha a mitad de madrugada dando por finalizada a aquella maravillosa aventura, sabía que jamás volvería a ver a Phil ya que ella solo era el revolcón de una noche. Lo que jamás sospecho es que luego de algunos años volvería a encontrarse con él, enterándose de que Phil era un hombre casado y que su esposa era nada más y nada menos que su jefa. ¿Volvería a perder su empleo por haber tenido una noche aventura con el esposo de su jefa?

Capítulo 1 Capitulo

Anteriormente llegar a su puesto de trabajo era un poco satisfactorio, al menos tenía como sustentarse ella sola. Pero esa mañana fue bastante diferente a las anteriores.

Al mirar aquel papel color rosa sobre su escritorio supo que era su fin, Ciana parpadea reiteradas veces mientras que sostiene el documento en sus manos. Es que ni siquiera quería desdoblar aquel papel.

La joven muerde levemente sus labios al mismo tiempo que siente querer romper a llorar, sin embargo, necesitaba mantener la compostura. Levanta la mirada viéndose completamente sola en aquel espacio.

Luego mira hacia la puerta donde seguramente se encontraba su jefe, Ciana baja la mirada hacia el documento y con un poco de valentía desdobla el papel para leer lo que ya sabía que contenía dicho documento.

Su jefe la estaba despidiendo.

-Genial, me he quedado sin empleo -suspira con pesadez.

Tanto que le costó encontrar trabajo para venirlo a perder por un accidente. Ciana frota su rostro con impaciencia.

-Si hubiese sabido que me iba a despedir por derramar café a su pantalón le hubiera vertido la jarra de café en la cabeza al muy cabezota.

No se alegraba de quedarse sin empleo, pero si se sentía algo aliviada de no tener que ver la cara de ese energúmeno que le toco tener que asistir. Había hecho bien su trabajo por un año entero, sin quejas, ni fallas, y por una tontería como derramar café en su pantalón la despedía.

Pero era evidente que sus razones eran otras, ese degenerado estaba cabreado ya que no quiso mantener relaciones clandestinas con él. Y ella estaba completamente segura de que se ganó el puesto de asistente presidencial porque su jefe le había puesto los ojos encima.

Había visto a las demás candidatas y ella era la única joven entre ese grupo, y por esa razón llegó a aquella conclusión debido a que no tenía nada de experiencia. Era imposible que eligiera a una novata en vez de una experta.

-¿Qué voy hacer ahora? -musita mirando el documento.

Lo único que le quedaba era recoger sus pertenencias esa misma mañana.

-Qué día tan malo, ¿eh? -Ciana se pone en pie rápidamente y esconde el papel rosa detrás de ella.

La joven parpadea al mirar a aquel hombre delante de ella, de inmediato su corazón comenzó a latir a prisa al mirar directamente esos ojos azules. Ciana se tensa y trata de sonreír.

-Buenos días señor Phil.

-Parece que no son tan buenos para ti -le responde mirando los ojos de ella -. ¿Te han despedido?

La pregunta de él la petrifico, llevaba 3 días viéndolo seguido en la compañía de su jefe y cada día que pasaba ella temblaba más que el anterior. Desde que lo vio fue como si algo de ella cambiase, todo en ella se estremecía cuando miraba a ese hombre.

Y eso no era todo, él también la observa con firmeza lo que ocasionaba que ella muriera lentamente. Ciana traga saliva mientras mantiene la sonrisa de tranquilidad.

-Parece que lo del café le ha molestado mucho a mi jefe.

-¿A si? -ella nota como él aquea la ceja lo que la hace derretir.

-Fue imprudencia mía.

-No creo que sea necesario tanto extremismo, despedirte por machar su traje es injusto.

Ella también lo pensaba, pero en ese momento le importo un pepino si estaba despedida. Era la primera vez que ese hombre le dirigía la palabra y se quedaba para charlar con ella. Las otras veces solo la miraba, pero no conversaba.

-Ciana, ¿no?

-Si.

-Lamento mucho lo que ocurrió ayer.

También lo lamentaba y más porque ya no volvería a ver a ese hombre nunca más, desde esa mañana estaba despedida así que no podía quedarse. Fuera de eso, tampoco le agradaba la idea de tener que escuchar al idiota de su ex jefe.

Si ya no era su empleada ni un café merecía que le llevará.

-Tengo una reunión con él.

-Pase adelante.

Phil sonríe de medio lado mientras que continúa hacia la oficina para ingresar en la misma. En ese momento Ciana suelta el aliento contenido y vuelve a mirar el papel en sus manos con mucho lamento.

-Joder, será mejor que me largue.

Observa la puerta y muerde sus labios, era una verdadera pena no volver a ver a ese hombre tan elegante y atractivo. Era el sueño de cualquier mujer.

[...]

-¿No quieres que la despida?

-No creo que sea necesario que lo hagas, además, no fue tan grave lo que ha hecho.

-Es buena secretearía, no lo puedo negar, pero es una tonta. He intentado seducirla miles de veces y nunca se ha dejado, prefiero a una chica que sepa cómo mantener su puesto en esta empresa.

Phil observa a su socio y no dice una palabra, baja la mirada para ver sus manos juntas, y solo consigue parpadear.

-¿No le dejaras el empleo?

-Puedo bajarla a recepción, donde no tenga que verla. Lo haría como un favor para ti.

-Al menos no se quedará sin empleo.

-En fin, lo resolveré luego. Ahora, hagamos negocios -el hombre sonríe abiertamente.

Sin embargo, Phil no dejaba de pensar en esa chica que se encontraba afuera sentada lamentándose por haber perdido su empleo por un cerdo como el que él tenía delante. Por desgracia debía hacer negocios con él.

No podía dejar los negocios a un lado por una empleada que apenas llevaba 3 días viendo, sin embargo, ese poco tiempo fue suficiente para no despegar sus ojos de ella. Era extraño que estuviera actuando de ese modo.

El CEO niega y sonríe, necesitaba concentrarse en los negocios. Cuando saliera de esa oficina le daría la noticia a la rubia que estaba afuera de que no se quedaría sin empleo. Ser la recepcionista era mejor a no tener un trabajo.

Para cuando finiquitaron las negociaciones, Phil se despidió de su socio con un apretón de manos, el CEO se encontraba impaciente por salir de esa oficina para darle la noticia a la secretaria.

Pero para su sorpresa, la rubia no estaba en su lugar de trabajo.

Hola niñas bellas, capítulos diarios, no se la pierdan...

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